Ankara, Turquía.- Luego del terremoto de magnitud 7.7 que sacudió Turquía, varios deportistas profesionales quedaron atrapados entre los escombros de edificios y hoteles que se derrumbaron. Las diversas federaciones reportaron que atletas del voleibol, balonmano, lucha libre y futbol esperan ser rescatados como otros miles de ciudadanos víctimas de la tragedia que ha dejado más de dos mil muertos.
En Malatya, los jugadores del equipo masculino de voleibol de esta ciudad quedaron sepultados entre los escombros del hotel Kircuval, en el que estaban alojados. Hasta el momento, tres integrantes del equipo han sido rescatados, según información de la agencia de noticias EFE. En la misma situación se encuentran las jugadoras del equipo de voleibol de Hatay y los futbolistas del Marasspor de la segunda división turca.
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Según informó el seleccionador turco de lucha libre Taha Akgultreinta, cuarenta deportistas del equipo de lucha de la ciudad de Kahramanmaras están atrapados también entre las ruinas de un edificio de esa provincia. El seleccionado turco de balonmano Cemal Kutahya y el técnico del Hatayspor Savas Yuksel también están bajo las ruinas de uno de los edificios colapsados, según un comunicado de la Federación Turca de Balonmano.
El mediocampista del Hatayspor, Christian Atsu, se encuentra entre los desaparecidos por el terremoto y hasta el momento no se ha podido contactar con él. El portero del Yeni Malatyaspor, Ahmet Eyup Turkarslan, sigue atrapado entre las ruinas de un edificio de la ciudad de Malatya, su mujer ha sido rescatada, pero aún no localizan al jugador. Por su parte, las autoridades deportivas del país, suspendieron toda actividad deportiva profesional.
“Todas las competiciones deportivas nacionales previstas en nuestro país han sido suspendidas hasta nuevo aviso”, informó el ministro de Juventud y Deportes de Turquía, Mehmet Muharrem Kasapoglu, en su cuenta de Twitter. Mientras tanto las labores de rescate en los diferentes puntos de la zona afectada siguen en labores de rescate.
Fuente: Tribuna, EFE