París, Francia.- El delantero del Paris Saint-Germain, Ousmane Dembelé, ganó el Balón de Oro, lo que lo acredita como el mejor jugador del mundo; el jugador francés superó a Lamine Yamal, con el cual compartió la terna final para recibir el galardón más importante en la individualidad dentro del futbol mundial.
El Théâtre du Châtelet de París, Francia, recibió la ceremonia que entrega diversos premios, los que van desde el mejor equipo del mundo, hasta el galardón que acredita al mejor jugador en el futbol durante un año; fue un evento repleto de estrellas actuales y retiradas del balompié mundial.
Tanto Dembelé como Lamine Yamal se perfilaban como los favoritos para llevarse dicho reconocimiento; tal fue así que ambos jugadores fueron los que permanecieron hasta la terna final, pues conforme avanzaba el evento, se fueron descartando parte de los 30 nominados para ser acreedores al Balón de Oro.
Fue el delantero del Paris Saint-Germain el que se quedó con el galardón, siendo respaldado por la gran temporada que tuvo su club, pues junto con el conjunto parisino, levantó un total de cinco trofeos en el año, dentro de los que destacan la Champions League, la Ligue One y la Supercopa de Europa. La mayor fuga de votos que ponía en riesgo la elección del delantero como el mejor jugador del mundo era que France Football, medio que organiza el Balón de Oro, colocó a nueve jugadores del PSG como nominados.
Durante la temporada anterior, el delantero francés completó fascinantes números, pues disputó 53 partidos, marcando 35 goles y 10 asistencias, con poco menos de 3 mil 500 minutos en cancha. La verdadera valía dentro del club para Dembelé era lo que aportaba tanto dentro como fuera de la cancha y eso fue resaltado en varias ocasiones por Luis Enrique, entrenador del PSG, pues en más de una ocasión lo señaló como el jugador clave en todos los campeonatos logrados por el club.
Su más cercano perseguidor, Lamine Yamal, quedó cerca en las votaciones, aunque fue superado en estadísticas por el futbolista del PSG; el español, con la misma cantidad de partidos que Dembelé, solo pudo anotar 22 goles, además de 25 asistencias y 4 mil 500 minutos en cancha. Uno de los motivos determinantes para que la balanza se inclinara ante el francés fue el buen rendimiento que tuvo el club, pues el Barcelona solo consiguió tres títulos y fue eliminado en las semifinales de la Liga de Campeones de la UEFA.
Fuente: Tribuna del Yaqui
