Reino Unido.- Sophie de Wessex, nuera de la Reina Isabel II, dos días después de que lamentablemente falleciera su suegro, el Príncipe Felipe de Edimburgo, fue una de las asistentes a la misa dominical en la Capilla Real de Todos los Santos, tras lo que habló sobre el duelo que vive la Corona, destacándolo de "terrible".
La mañana de este domingo 11 de abril, parte de la familia real se presentó en Royal Lodge, terrenos en Windsor, donde se encuentra la Capilla Real de Todos los Santos, para estar presentes en la primer misa dominical en honor al duque de Edimburgo.
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Tras la ceremonia, la esposa del Príncipe Eduardo de Wessex habló con los asistentes para agradecerles su apoyo, revelándoles cómo fue la muerte de su suegro, señalándola como "pacífica" y cómo si alguien hubiera "tomado su mano" para llevárselo.
Sabes que va a suceder, pero cuando sucede es solo este enorme, enorme agujero. Fue tan suave, fue como si alguien lo tomara de la mano y se fuera. Muy, muy pacífico y eso es todo lo que quieres con alguien, ¿no?", relató Sophie.
Con lágrimas en los ojos, la duquesa de Wessex, junto a su esposa e hija, expresó que para ellos fue "terrible" la pérdida aunque ya la veían venir, diciendo que no importaba que ya supieran que estaba cerca el final.
Creo que es mucho más fácil para la persona que se va que para la gente que se queda atrás, todos estamos sentados aquí mirándonos y diciendo: 'Esto es horrible'", concluyó.
Fuente: Daily Mail