Ciudad de México. - Tras más de un año de disputas legales, Mayela Laguna anunció que ha decidido poner fin a la batalla judicial para que Luis Enrique Guzmán, hijo menor de la actriz Silvia Pinal, reconozca a su hijo Apolo como su descendiente. A través de un comunicado compartido en Instagram, Laguna expresó su decisión de retirar la apelación relacionada con la prueba de ADN que concluyó que Guzmán no es el padre biológico del menor.
Este 25 de noviembre de 2024, Mayela Laguna hizo pública su determinación de abandonar el caso, explicando que su decisión busca proteger a su hijo de los daños emocionales causados por la exposición mediática y las irregularidades legales del proceso:
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He decidido hoy dejar la apelación. Los que siguen este caso saben a qué me refiero. Se luchó contra viento y marea, pero ya no quiero seguir. Quiero que se quite el apellido lo antes posible y seguir con nuestras vidas", escribió Laguna.
Pero eso no fue todo, pues la madre de Apolo también señaló irregularidades en el manejo de las pruebas de ADN, cuestionando los procedimientos del Instituto de Ciencias Forenses y la falta de cadena de custodia.
El conflicto inició en junio de 2023, cuando Luis Enrique Guzmán reveló, mediante un comunicado emitido por su abogado, que había descubierto que no era el padre biológico de Apolo. Esto marcó el inicio de una intensa disputa que incluyó acusaciones públicas y una batalla legal que se extendió por más de un año.
En septiembre de 2024, Laguna informó que las pruebas de ADN realizadas a Luis Enrique Guzmán y al menor habían resultado negativas. Sin embargo, afirmó que continuaría luchando por los derechos de su hijo, aunque finalmente decidió abandonar el proceso apelativo:
Sé que debería seguir luchando por las injusticias, pero el único afectado en todo esto es mi hijo, a quien jamás abandoné", expresó Laguna.
Es necesario decir que el caso ha estado rodeado de controversias, declaraciones cruzadas y el involucramiento de la familia Pinal, quienes en su momento respaldaron a Luis Enrique Guzmán. Por su parte, Mayela Laguna denunció que la batalla legal y mediática afectó su vida personal y, sobre todo, el bienestar de su hijo.
A pesar de su decisión de abandonar el caso, Laguna hizo énfasis en que actuó siempre pensando en el bienestar de Apolo: "Tengo la conciencia tranquila y la cabeza donde debe estar. Saco mi bandera blanca ante esta familia y los medios de comunicación", concluyó.
Con la renuncia a la apelación, el caso parece llegar a su fin legal, aunque los conflictos emocionales y familiares persisten. Mayela Laguna espera cerrar este capítulo y brindar estabilidad a su hijo, mientras que Luis Enrique Guzmán y la familia Pinal enfrentan las repercusiones mediáticas de un caso que ha mantenido los reflectores sobre ellos durante más de un año.
El destino de Apolo, ahora sin el apellido Guzmán, se centrará en la vida privada que su madre busca construir lejos de la polémica.
Fuente: Tribuna