Ciudad de México.- Un famoso actor de telenovelas, quien empezó su carrera en los 80's en la televisión, reaparece tras varios años retirado del medio artístico y no puede evitar romper en llanto al recordar cómo fue acabar en la cárcel por haber agredido a su exnovia. Se trata de Osvaldo Ríos, quien como se recordará, estuvo tras las rejas en el 2004 durante casi cuatro meses al ser encontrado culpable de violencia doméstica.
El artista puertorriqueño fue protagonista en melodramas icónicos de la televisión hispana como Kassandra, La viuda de Blanco y Rauzán. Llegó a México en el 2000 y se incorporó a Abrázame muy fuerte en Televisa. Luego protagonizó El juramento en Telemundo y volvió a Televisa para actuar en Corazón Salvaje en el 2009. Su última aparición en la pantalla chica fue en Triunfo del amor del 2010 al 2011, donde dio vida a 'Osvaldo Sandoval', esposo del personaje de Victoria Ruffo.
Después de ese proyecto, él tomó la decisión de renunciar a su contrato de exclusividad en Televisa porque quería pasar más tiempo con su familia, dejando las telenovelas y la fama en segundo plano. En una entrevista, Ríos confesó que prefirió irse a Miami con sus hijos: "Te voy a decir algo que no se lo he dicho a nadie: yo renuncio a Televisa en el año 2011 porque, digo, mi misión de ahora en adelante es unir a mis tres hijos de diferentes madres bajo un mismo techo criándose con una familia con su papá", contó.
Y aunque ahora resurgió y forma parte del reality show de Telemundo La Casa de los Famosos 2, donde ya se volvió de los preferidos del público para ganar, el actor no pudo contener las lágrimas ante las cámaras del programa mientras recordaba el episodio de violencia doméstica que lo llevó a la cárcel. El boricua de 61 años se sinceró y habló sin tapujos del castigo que recibió por el hecho de golpear a su pareja hace 18 años.
En el 2004 paso por un proceso muy difícil. Fui encontrado culpable por violencia doméstica. Se dio con una novia que tuve, a la que lamentablemente no supe valorar. Ahí lamentablemente cometí actos de violencia verbal y violencia física", dijo Ríos.
Y agregó: "Por eso fui juzgado, fui convicto, cumplí con lo que se impuso que fueron tres meses, 117 días para ser exacto, de confinamiento, más un año y medio completo de rehabilitación". Con la voz entrecortada y ya entre lágrimas, Ríos manifestó que entendía que sus actos estuvieron mal y tuvieron consecuencias, mismas que estuvo de acuerdo en pagar. Incluso agradeció esta experiencia en su vida, pues "merecía el castigo".
Si no hubiera pasado por ese proceso no sé qué sería de mi vida en estos momentos. Mirando para atrás sí entiendo que fue justo que ocurriera eso, sí entiendo que merecía ese castigo, esa unidad. Tuve la oportunidad de verme a mí mismo de la manera más dura", manifestó.
Tras vivir ese terrible momento, Osvaldo reflexionó y reconoció que cometió muchos errores y que fue muy "egoísta y narcisista", afirmando que perdió todo por lo que hizo: "Me di cuenta de todos los errores que había cometido, lo egoísta que fui, el daño que le hice a las personas que más amaba con palabras, con acciones. Y me di cuenta lo egoísta, lo narcisista, lo muy mal que andaba, desenfocado en mi vida. Había perdido mi libertad, había perdido contratos millonarios, había perdido prácticamente todo".
Fuente: Tribuna