Ciudad de México.- Este 8 de octubre se conmemora el Día Internacional de la Dislexia, el cual tiene el objetivo de hacer una reflexión sobre las personas que tienen este padecimiento a nivel mundial, así como las afectaciones neurobiológicas y los trastornos del aprendizaje. Sin embargo, pocas personas conocen el origen de este día y de este padecimiento, que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud está presente en 700 millones de personas.
Uno de los objetivos del Día Internacional de la Dislexia es hacer conciencia sobre este trastorno, ya que afecta directamente al proceso de aprendizaje y se puede manifestar en diferentes grados de severidad. En ese sentido fue en 2008 cuando la Asociación Dislexia y Familia (DISFAM) junto a la Federación Española de Dislexia (FEDIS) creó la campaña “Unidos por la Dislexia” con el objetivo de dar visibilidad a las dificultades específicas de aprendizaje.
Te podría interesar
Asimismo, en 2002 la Asociación Internacional de la Dislexia definió al padecimiento como una en discapacidad específica de aprendizaje de origen neurobiológico. Además, en México no existe un estándar específico para identificar a la dislexia. Normalmente los profesores generan falsas alarmas y confunden información con la inversión en la posición de las letras b y d. Razón por la cual se requiere de un diagnóstico más específico con especialistas.
La conmemoración del Día Internacional de la Dislexia es relativamente nueva, ya que fue en 2021 cuando la Asamblea General de la Asociación Europea de Dislexia aceptó la propuesta de que se conmemore el 8 de octubre. Hasta el momento se desconocen las cifras en México sobre la población que padece de dislexia, sin embargo, existen varias tratamientos y formas de trabajo para disminuir las afectaciones al aprendizaje.
La dislexia es una serie de alteraciones de base neurobiológica, que afecta a los procesos cognitivos relacionados con el lenguaje, la lectura y la escritura. Las personas que la padecen tienen dificultades para decir el abecedario, denominar letras, realizar rimas simples y para analizar o clasificar los sonidos. Además, al leer, tienen omisiones, sustituciones, distorsiones, inversiones o adicciones, lentitud, vacilaciones, problemas de seguimiento visual y déficit en la comprensión.
Fuente: Tribuna