Ciudad de México.- En mayo, en plena campaña por la alcaldía Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega fue atacada con arma de fuego cuando se transitaba las calles de Ciudad de México a bordo de su camioneta. El atentado ocurrió en un contexto de violencia electoral que cobró la vida de 38 candidatos, de acuerdo con el conteo de la consultora Datalnt, pese a ello, Ulises Lara, encargado de despacho de la Fiscalía General de Justicia de la capital, insinuó que la agresión hacia la abanderada del PRI-PAN-PRD, no fue más que un montaje. Tal declaración fue respondida por Rojo de la Vega.
La alcaldesa electa reprochó la postura que adoptó el titular de la Fiscalía y alegó que había transgredido un nuevo nivel de descaro al señalar a una víctima. Además, argumentó que las acusaciones que hizo en su contra se hicieron para "favorecer a su partido" o bien, se ciñen a la intención de venganza hacia ella por no "saberse quedar callada".
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Recordó que México es un país con altos índices de crímenes ejercidos hacia las mujeres y que sigue alimentando la narrativa de que la culpa es de las mismas afectadas. Bajo esta línea, echó luz sobre la nula voluntad del fiscal por garantizar la protección hacia las víctimas, a quienes se ha encargado de prejuzgar sin ninguna prueba.
Demostró que no tiene la más mínima intención de proteger a las víctimas prejuzga y sin ninguna sola prueba, se lanza en mi contra revictimiza, violentándome, mintiéndole en la cara a millones de capitalinas y capitalinos", arremetió.
La versión de Ulises Lara
La desconfianza de Lara hacia el caso de la funcionaria despegó desde las recientes intervenciones de Alessandra Rojo. De acuerdo con el fiscal, ella ha defendido a su posible agresor, actitud que ha levantado sospechas. Asimismo, se ha aventurado a dar "conclusiones de una investigación que se encuentra en curso".
Vale mencionar que a finales de mayo, Alessandra Rojo culpó a la Fiscalía de "fabricar a un culpable de su atentado". En un comunicado dio a conocer que uno de los implicados presentó un aparo en donde dice que fue obligado a declarar una versión impuesta por las autoridades y que para coaccionarlo a firmarla, lo torturaron. Por otra parte, aseguró que a los acusados les habían "sembrado" droga. Sobre ello, Ulises Lara calificó de "irresponsable" a la alcaldesa electa por asegurar que la Fiscalía fabrique o falsee declaraciones.
Fuente: Tribuna Sonora