Washington, Estados Unidos.- De manera sorpresiva el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este miércoles 2 de abril la implementación de aranceles recíprocos, una medida que ya sacudió el comercio internacional. No obstante, México y Canadá quedaron libres de estas tarifas debido a que no aplicaron aranceles a las exportaciones estadounidenses.
Desde la Casa Blanca, Trump declaró la jornada como el "Día de la Liberación" y afirmó que su objetivo es corregir lo que considera prácticas comerciales injustas en perjuicio de Estados Unidos. "Hoy es uno de los días más importantes en la historia de América", declaró, enfatizando que su plan traerá de vuelta empleos e industrias al país.
A pesar de no verse afectado, México sigue en la mira del mandatario, quien volvió a tildar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) como "el peor acuerdo comercial de la historia". No obstante, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, reafirmó su compromiso con el tratado y destacó la importancia de la cooperación trilateral para fortalecer la economía regional.
El presidente de Estados Unidos, anunció su intención de solicitar al Congreso la cancelación del T-MEC, al que calificó como un "desastre" para su país. Según el mandatario, el déficit comercial con México asciende a 300 mil millones de dólares anuales, lo que, a su juicio, equivale a un subsidio a la economía mexicana. Además, aseguró que directivos de grandes empresas que actualmente operan en México se han comprometido a trasladar su producción de vuelta a Estados Unidos.
Desde el 4 de marzo, los productos mexicanos no amparados por el T-MEC enfrentan un arancel del 25 por ciento en las aduanas estadounidenses. Posteriormente, el 12 de marzo, la administración de Trump aplicó la misma tarifa a todas las exportaciones mexicanas de acero y aluminio. El presidente justificó estas medidas como parte de su estrategia para eliminar lo que considera “abusos comerciales” y reducir el déficit con México.
Además, sostuvo que estas acciones fomentarán el regreso de empresas a territorio estadounidense y la creación de millones de empleos en su país. Los nuevos aranceles, de hasta 25 por ciento sobre productos clave como acero y aluminio, entraron en vigor de inmediato, pero México logró esquivar el golpe, un alivio significativo para su economía. Sheinbaum atribuyó esta exención al diálogo constante y a la estrategia comercial de su gobierno.
Mientras tanto, China fue el país más castigado con tarifas del 34 por ciento, seguidas por Japón y Corea del Sur (25 por ciento), y la Unión Europea (20 por ciento). Otros socios como Taiwán y Vietnam enfrentan impuestos del 32 por ciento y 46 por ciento, respectivamente. La incertidumbre golpeó los mercados financieros, y el peso mexicano se depreció un 1.7 por ciento en la última semana. No obstante, México celebra su exclusión de los aranceles como una victoria clave en un panorama comercial cada vez más incierto.
Fuente: Tribuna
