Beirut, Líbano.- Una semana convulsa es la que han vivido los habitantes de Beirut, pues no solo sufrieron 154 pérdidas humanas tras la explosión de un almacén de pirotecnia, sino que este sábado detonó la violencia por fuera del edificio del Parlamento del Líbano.
Las manifestaciones que se registraron por fuera del palacio legislativo, se debió a que los rijosos culpan a las autoridades por la trágica explosión que dejó más de 5 mil heridos y daños materiales millonarios.
Muchos de los manifestantes inconformes con la situación, usando máscaras faciales, arrojaron objetos contra las fuerzas de seguridad y se niegan a retirarse.
Un grupo tomó bajo su control el Ministerio de Exteriores del Líbano. Los asaltantes han proclamado la Cancillería como su sede y han quemado el retrato del presidente del país, Michel Aoun.
Al menos 130 personas resultaron heridas esta jornada durante los enfrentamientos y 28 de ellas fueron trasladadas a hospitales, según la Cruz Roja libanesa. Además, un oficial de policía libanés murió en las protestas, sostuvo un portavoz de institución policial.
Con información de RT