Cuincy, Francia.- Una mujer que trabajaba en una escuela de Cuincy (Norte) fue acusada y puesta en prisión preventiva por abuso sexual de 11 niños de entre 7 y 10 años, informó el jueves la fiscalía de Douai. Fue imputada y puesta en prisión preventiva el 30 de noviembre por agresión sexual a menores de 15 años y corrupción de menores de 15 años, agravada por la circunstancia de que los hechos fueron cometidos dentro de una escuela, contó el fiscal Frédéric Fourtoy.
La sospechosa es una empleada de guardería de 21 años, contratada por el ayuntamiento de Cuincy a principios del curso escolar en septiembre para realizar la limpieza del establecimiento. La madre de un niño víctima de tocamientos por parte de esta empleada testificó: "Los niños empezaron a hablar cuando la joven les pidió que le tocaran los senos y los pezones, repitiendo que era divertido y que si no lo hacían mataría a sus padres". Fue uno de los profesores del colegio quien recogió los primeros testimonios denunciando gestos inapropiados por parte de la mujer.
Desde principios de noviembre, sustituyó a un responsable de actividades extraescolares del establecimiento que se encontraba de baja por enfermedad. Los hechos denunciados por los estudiantes habrían ocurrido durante la hora del almuerzo, durante la cual los estudiantes son supervisados por responsables de actividades extraescolares.
Los hechos habrían durado al menos seis semanas. La sospechosa "niega todos los hechos que se le imputan", subraya el fiscal de Douai. El 30 de noviembre, después de 48 horas bajo custodia policial, fue puesta en prisión preventiva. Actualmente, se está llevando a cabo una investigación judicial y una investigación administrativa. Por su parte, el rectorado ha creado una unidad psicológica en la escuela para que los niños puedan recurrir a ella.
Fuente: Tribuna Sonora