Ciudad de México.- El presidente de Perú, José Jerí, ha intensificado el conflicto diplomático con México al advertir que no le "tiembla la mano" para ordenar el ingreso a la embajada mexicana en Lima, donde se encuentra asilada la exprimera ministra Betssy Chávez. Este amago eleva la tensión regional y revive el debate sobre la inviolabilidad de las sedes diplomáticas en el contexto del tenso conflicto embajada México-Perú.
La crisis escaló luego de que la justicia peruana dictara, el viernes 21 de noviembre de 2025, cinco meses de prisión preventiva contra Betssy Chávez. La exfuncionaria, quien se encuentra refugiada en la sede diplomática de México desde hace casi tres semanas, está procesada por el intento fallido de Golpe de Estado del expresidente Pedro Castillo en diciembre de 2022. En una entrevista con el diario peruano 'El Comercio', el mandatario José Jerí, de 39 años, dejó clara su postura contundente. Jerí aseguró que está abierto a todo tipo de posibilidades y decisiones respecto a la situación legal de Chávez.
El presidente peruano enfatizó que, aunque aún no ha meditado con el primer ministro y su gabinete la medida concreta a tomar, el uso de la fuerza no está descartado. Las declaraciones exactas de José Jerí fueron:
- "No me limito y, si tiene que ingresarse a la embajada mexicana, se hará".
- "He demostrado con acciones concretas, que muchos no se lo esperaban, que no me tiembla la mano".
- "Estoy convencido de que todos somos juzgados por las acciones".
Jerí también puntualizó que México sabe que, si Chávez sale de la embajada, será capturada inmediatamente, y que hay presencia de policías peruanos afuera de la sede diplomática, lo cual es visible. La policía peruana reforzó de hecho la seguridad en la sede de la embajada mexicana tras la orden de captura internacional.
La situación de Betssy Chávez, quien fue primera ministra del gobierno de Pedro Castillo, ha sido el detonante de un severo quiebre en las relaciones bilaterales. Perú rompió relaciones diplomáticas con México a principios de noviembre de 2025, tras conocer que se le había concedido asilo a Chávez, calificándolo como un exceso de injerencia en asuntos internos. Chávez se encuentra en la residencia de la embajada a la espera de un salvoconducto para abandonar el país.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México recordó en un comunicado que recibió garantías de inviolabilidad de su sede diplomática y reiteró su pedido de un salvoconducto para Chávez. El escenario de una posible irrupción en la embajada ha generado advertencias en la región. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, publicó en sus redes sociales que, "si Perú agrede la embajada de México, Colombia retira su embajada".
Ante las posibles críticas que le caerán de la izquierda latinoamericana si decide ingresar a la sede diplomática, Jerí se mostró impasible: "A palabras necias, oídos sordos" y "no tengo miedo cuando sé que estoy haciendo lo correcto". Jerí fue cuestionado sobre la posibilidad de restablecer relaciones cuando la presidenta Claudia Sheinbaum concluya su mandato. El mandatario peruano comentó: "Lamentablemente, nuestras relaciones políticas desde el 2021 han sido muy volubles por un exceso de injerencia de algunos países en decisiones autónomas. Somos un país soberano y nuestras relaciones se han lesionado porque otros presidentes han permitido estos excesos. Yo no lo voy a permitir".
Las relaciones entre ambos países se habían deteriorado previamente tras la destitución de Castillo, cuando México otorgó asilo a la esposa y dos hijos del exmandatario. La advertencia de José Jerí sobre ingresar a la embajada plantea una grave violación de los compromisos internacionales, equiparable a lo ocurrido con el expresidente de Ecuador, Daniel Noboa, quien ordenó asaltar la embajada de México y secuestró al exvicepresidente Jorge Glass en abril de 2024.
Fuente: Tribuna del Yaqui
