El Vaticano, Italia. – Tras la muerte del Papa Francisco el pasado 21 de abril, las autoridades de la Ciudad del Vaticano instalaron la chimenea en la capilla Sixtina para el cónclave a desarrollar el próximo 7 de mayo, donde se elegirá al próximo pontífice quien dirigirá los destinos de la iglesia católica, por ello las autoridades de la santa sede instalaron en el tejado de este recinto, el punto por donde se dará a conocer la decisión tomada al mundo.
Se reunirán alrededor de 133 cardenales con menos de 80 años para votar por el sucesor del primer Papa latinoamericano en una sesión de dos rondas de votación, las papeletas serán quemadas en un horno especial para indicar el resultado al exterior y conozcan los fieles el panorama de lo sucedido entre los cardenales reunidos.
Según información de Milenio, las papeletas son quemadas con un componente de perclorato de potasio, antraceno, un componente de alquitrán de hulla y azufre que produce el humo negro e indica que aun no ha sido elegido al nuevo pontífice, en caso de haber algún acuerdo y tener al seleccionado, las papeletas se mezclan con clorato de potasio, lactosa y resina de cloroformo para generar el humo blanco y confirmar el acuerdo de quien será el próximo Papa.
El pasado 13 de marzo de 2013 estas mismas chimeneas arrojaron humo blanco después de la quinta votación del cónclave donde fue seleccionado el cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio como el Papa Francisco quien fue el primer Papa latinoamericano de la historia.
El pontificado de Francisco será recordado por ser amado por unos debido a su enfoque puesto en los pobres y marginados y criticado por otros quienes decían sembraba la confusión entre los fieles en temas de moralidad y ley eclesiástica, los conservadores y tradicionalistas no se cree que tengan mayoría entre los 135 cardenales electores, esperan que el nuevo pontífice reafirme las enseñanzas fundamentales de la Iglesia y actúe como una figura estabilizadora en la burocracia vaticana.
Francisco nombró a dos laicos para dirigir las comunicaciones del Vaticano y su ministerio de Economía y a dos monjas para jefa de la oficina del Vaticano responsable de todas las órdenes religiosas católicas del mundo y para jefa de la administración del Estado de la Ciudad del Vaticano, fueron una evidencia de su creencia de otorgar mayor participación a las mujeres en la toma de decisiones al interior de la iglesia.
Fuente: Tribuna
