El Vaticano, Roma. – El cardenal Timolnthy Dolan arzobispo de Nueva York explicó algunos de los rituales a seguir por parte del consejo cardenalicio que se reúne en la capilla Sixtina para elegir al próximo sucesor del Papa Francisco, quien falleció el pasado 21 de abril a los 88 años y dejó la sede vacante del líder de la iglesia católica.
Según relata, a Infobae, la ceremonia que se desarrollará el próximo 7 de mayo, se llevará a cabo bajo estrictas normas de confidencialidad, tradición y espiritualidad, alejadas de cualquier comparación con procesos electorales seculares, en donde cada uno de los cardenales procedentes de todas partes del mundo tienen la misión de discernir la voluntad del espíritu santo. “La selección de papa no consiste en hacer campaña, sino que se centra en la oración y la reflexión”, afirmó.
Aunque para varios observadores externos puede parecer el cónclave un espacio donde existen divisiones ideológicas al interior del colegio cardenalicio, afirma que se ven como creyentes, discípulos y hermanos, por ello cada uno tendrá la oportunidad de hablar durante el proceso.
Dolan relató una anécdota significativa del cónclave de 2013: durante la oración inicial, un predicador franciscano les dijo a los cardenales: “Están asustados porque tienen una tarea difícil al elegir al próximo papa. Déjenme tranquilizarlos. Es fácil. El Espíritu Santo ya eligió al próximo papa. Su tarea es descubrir quién es”.
Comentó que en cada proceso es un espacio de intercambio sobre la situación mundial de la iglesia, el día que comienza el cónclave, los cardenales participarán primero en una misa solemne presidida por el decano del Colegio de Cardenales, actualmente Giovanni Battista Re, de 91 años quien ya no podrá votar por haber superado el límite de edad de los 80 años.
Después de la misa, los cardenales ingresarán a la Capilla Sixtina, que permanecerá cerrada al público durante todo el proceso, ahí se tiene el primer escrutinio la misma noche, pero seguirán votando hasta obtener uno de ellos dos tercios de los votos del colegio, posterior a cada ronda de votación es comunicado el resultado a los más de Mil 300 millones de católicos en el mundo mediante la señal del humo emanado de la chimenea de la capilla Sixtina; este será negro en caso de no llegar a algún acuerdo y blanco si existe un nuevo pontífice.
Señaló el Arzobispo de Nueva York que este cónclave es el inicio de una nueva etapa en la iglesia ya que varios cardenales coinciden en preservar ciertas características del pontificado de Francisco, al llevarse a cabo con la máxima reserva permite a los cardenales exponer sus ideas con libertad y sin influencias externas con la máxima confidencialidad.
Fuente: Tribuna
