Washington, Estados Unidos.- Las detenciones en tribunales por parte de ICE forman parte de la más reciente medida del Gobierno de Trump para acelerar el ritmo de los arrestos de inmigrantes indocumentados, aunque la estrategia se está enfocando ahora a detener a otros migrantes quienes no tienen antecedentes penales o estén en proceso por algún delito, sino en solicitudes de residencia temporal o permanente, aunque tengan pendiente aún la audiencia con el juez.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) derogó recientemente una directriz que limitaba la aplicación de las leyes de inmigración en los juzgados o en sus inmediaciones, funcionaros de Trump argumentaron que esta limitación obstaculizaba la capacidad de los agentes de inmigración para detener a individuos peligrosos.
Ahora, los agentes de inmigración pueden realizar arrestos en los tribunales mediante el “sentido común”. “La capacidad de las fuerzas de seguridad para detener a extranjeros ilegales delincuentes en los juzgados es sentido común”, dijo Tricia McLaughlin, portavoz del DHS.
De acuerdo con información de CNN, la estrategia ahora se centra en migrantes que se encuentran bajo procedimientos migratorios pero no detenidos por estar en el llamado registro de no detenidos pero ahora se ha ordenado a los agentes de ICE detener a los inmigrantes cuya expulsión haya sido ordenada o casos desestimados.
El presidente Donald Trump amplio el proceso conocido como expulsión acelerada que se aplicaba a quienes tenían menos de 24 meses en el país, pero ahora se ha extendido a migrantes con más tiempo de estancia en los Estados Unidos, bajo este nuevo procedimiento los agentes de migración se coordinan directamente con personal de los tribunales para identificar, localizar y detener a los migrantes que tienen cita en alguna audiencia y sin aviso previo.
La abogada especializada en temas de migración Vanessa Manzi explicó, que en la corte de migración de Santa Ana, muchos abogados aceptaban excusar la traducción y la presencia de sus clientes por lo que podían ellos abandonar la sala y representarlos, en ese caso si el fiscal pedía desestimar el caso la jueza aceptaba; pero una vez que salían del recinto los agentes de ICE esperaban afuera a las personas para arrestarlas, incluso esposaban a los detenidos en público, lo que generó alarma entre quienes presenciaban la situación.
Detalló que la Corte de Santa Ana es especialmente susceptible a estas detenciones porque exige la presencia física de los inmigrantes, incluso si están representados por un abogado, esto facilita que ICE concentre allí sus operativos y logre detener a un mayor número de personas en un solo día; según versiones del personal de seguridad del lugar, en una sola jornada se llevaron a unas 50 personas.
La abogada también señaló que muchos inmigrantes se presentan sin representación legal, lo que los vuelve aún más vulnerables a estas redadas dentro del sistema judicial.
Un portavoz de alto rango del DHS afirmó: “La secretaria (Kristi) Noem revirtió la política de captura y puesta en libertad de Biden, que permitió que millones de extranjeros ilegales no controlados anduvieran sueltos por las calles estadounidenses. Esta administración aplica una vez más el Estado de derecho”.
“ICE está ahora siguiendo la ley y colocando a estos extranjeros ilegales en expulsión acelerada, como siempre debería haber sido. Si tienen una alegación válida de miedo creíble, continuarán en los procedimientos de inmigración, pero si no se encuentra ninguna alegación válida, los extranjeros serán objeto de una rápida deportación”, agregó el portavoz.
Varios de los abogados de inmigración argumentan que esta estrategia castiga a quienes están siguiendo las reglas migratorias de Estados Unidos y advierten que esta práctica amenaza el debido proceso y disuade a los inmigrantes a acudir a las audiencias.
“No sé si alguna política ha cubierto expresamente los tribunales de inmigración, porque la idea de detener a personas en un tribunal de inmigración es extraña e históricamente solo ocurre si alguien viola los términos de su liberación”, dijo John Sandweg, exdirector en funciones de ICE durante la administración de Obama.
En Arizona, agentes han detenido a inmigrantes a las puertas de los tribunales y en espacios públicos, en Maryland, un indocumentado fue esposado y atado en el pasillo del tribunal de inmigración de Hyattsville y escoltado fuera del edificio y se han producido detenciones similares en tribunales de estados como Virginia, Pensilvania, Illinois, Nueva York y California.
Según datos de la Oficina Ejecutiva de Revisión de Casos de Inmigración, existen casi cuatro millones de casos pendientes y solo en el año 2024 se presentaron 1.8 millones de nuevos casos de deportación, no estaban detenidos los migrantes; por lo que al estar ansiosa la administración de Trump por aumentar las cifras de deportaciones detienen a los migrantes que se presentan en los tribunales cuando tienen audiencias para definir su estatus en Estados Unidos y de ser posible conseguir una residencia legal, aunque no tengan antecedentes penales o algún otro procedimiento jurídico en su contra.
Fuente: Tribuna
