Aquiles Serdán, Veracruz.- El municipio de San Pedro Soteapan se tiño de tragedia con la muerte de una pequeña de cinco años que consumió pan envenenado que encontró en su casa.
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De acuerdo con la información vertida por los testigos, la menor, de nombre Adriana, jugaba en el patio en compañía de su hermano Jacobo, de siete años.
En ese momento, los niños tomaron el alimento que alguien arrojó dentro del hogar y se lo llevaron a la boca. Momentos después, la sustancia tóxica hizo efecto en el organismo de los afectados.
Su papá los halló convulsionándose, por lo que los trasladó con rapidez al Hospital "Valentín Gómez Farías", pero por desgracia, la pequeña perdió la vida, mientras que los médicos catalogan el estado de salud de Jacobo como grave.
Los familiares sospechan que el pan estaba pensado para uno de sus perros, pues antes ya habían intentado matarlo de la misma manera.
Fuente: El Sol de Chilpancingo
