Ciudad Obregón, Sonora.- La mañana de este viernes 15 de julio, fue encontrado otro cadáver en envuelto en plástico negro y atado con alambre en el Valle del Yaqui, con lo cual suman 23 los homicidios en el séptimo mes del año; el cuerpo fue dejado del lado poniente de la calle Fresno, entre 500 y media y 600, por lo que fue necesario cerrar el paso de los vehículos en ambos sentidos para realizar las diligencias legales. El cadáver embolsado en plástico negro tenía las manos atadas hacia la espalda y los pies amarrados, mientras que la parte superior e inferior del cuerpo estaba atado con alambre, de manera que no se le apreciaba la cabeza ni los pies.
Se apreciaba que era un individuo delgado y de estatura alta, según la silueta; fue tirado frente a la entrada de un campo agrícola y fue hallado por residentes del sector poco después de las 5:00 horas. Como primeros respondientes acudieron elementos de la Policía Municipal de la comisaría de la colonia Marte R. Gómez, para que minutos después acudiera personal de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC) y del Servicio Médico Forense (Semefo).
Tras revisar las condiciones en las que se encontraba el cuerpo sin vida, inspeccionaron el área para encontrar indicios del crimen. Posteriormente se hizo el levantamiento y traslado de la nueva víctima de la violencia en Cajeme, para después dejarlo en el anfiteatro del Centro Integral de Procuración de Justicia del Estado a disposición de médicos legistas, quienes se encargarán de la necropsia de ley para establecer las causas que le provocaron la muerte.
Este hallazgo se suma a otro hecho la mañana del jueves 14, donde estaba otro cadáver con huellas de estrangulamiento, también atado de pies y manos, en la calle 10 entre 300 y Ejército Nacional, de la colonia Misión del Real. El cuerpo sin identificar fue encontrado poco antes de las 6:30 horas sobre el margen derecho del dren de aguas residuales que corre paralelo a la calle 10, sobre una cobija negra con rayas rojas y blancas.
También tenía una sábana beige, con café y naranja; estaba con las manos y pies atados con una cuerda de nylon color amarillo, además de que en el cuello tenía enredado un pantalón de mezclilla, con el cual se presume fue estrangulado, pues tenía el rostro amoratado como consecuencia de una asfixia por ahorcamiento. La víctima era de complexión robusta, tez morena y pelón, traía de ropa una camiseta tirahueso color negro, y su edad oscilaba entre los 35 y 40 años.
Fuente: Tribuna