Chalco, Estado de México.- La tarde de este lunes 21 de agosto, en el municipio de Chalco, Estado de México, se informó del deceso de la menor Katia, de 5 años de edad, quien recibió un impacto de bala en la cabeza, esto luego de que presenciara una agresión armada, por lo que durante más de 78 horas se estuvo debatiendo entre la vida y la muerte, por lo que lamentablemente ya no resistió sus heridas.
El deceso se confirmó alrededor de las 15:50 horas, esto luego de que se le fue practicada una tomografía a la menor, donde se detectó que ya no tenía flujo sanguíneo en la unidad de cuidados intensivos pediátricos del Hospital Regional de Alta Especialidad de Zumpango, es por ello que se confirmó que ya no reaccionaba, por lo que habría que esperar los datos que arroje la necropsia de ley, además de los estudios correspondientes tras lo ocurrido.
Según datos de Adriana Ramírez, mamá de Katia, la niña desafortunadamente resultó herida por una bala perdida luego de que acompañaba a su madre al mercado, esto a pesar de que trató esconderse del enfrentamiento armado, pero desafortunadamente un bala se encargó de dejarla lesionada, por lo que de inmediato en un mototaxi pudo ser enviada de emergencia a un hospital en delicado estado de salud.
Por el momento, no se conoce nada sobre el paradero de los agresores, es por ello que los Servicios Periciales de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) ya comenzó con las primeras averiguaciones de ley, con el fin de poder esclarecer el suceso a la brevedad posible, es por ello que los familiares también ya sostuvieron una reunión con los agentes para poder conocer características de los presentes.
A pesar de que se esperaba una buena evolución, desafortunadamente ya no pudo volver en sí, pues en todo tiempo la tuvieron sedada con la esperanza de que despertara, pero al practicarle un procedimiento que ya nada se podía hacer al respecto, es por ello que sus familiares ahora se encuentran a la espera de que el cuerpo de la niña sea entregado para darle el último adiós.
Fuente: Tribuna