Ciudad de México.- La delincuencia, con sus múltiples formas de manifestarse, continúa siendo un desafío constante para la seguridad ciudadana. En esta ocasión, las cámaras de seguridad en la alcaldía Iztapalapa han captado un acto de astucia criminal, donde un individuo se hace pasar por empleado de la reconocida marca Bonafont para llevar a cabo un robo sistemático de garrafones en tiendas de abarrotes de la localidad.
Los comerciantes locales han alzado su voz ante esta nueva amenaza, manifestando su preocupación por la audacia del sujeto y su capacidad para pasar desapercibido entre los trabajadores genuinos de la empresa. Ante las investigaciones realizadas, los auténticos empleados de Bonafont han declarado desconocer la identidad del impostor, profundizando así el misterio en torno a sus acciones.
No obstante, este caso no parece ser un incidente aislado. Informes sugieren que el individuo en cuestión ha perpetrado estos robos en múltiples ocasiones, concentrándose principalmente en la colonia Tepalcates. Los testimonios de los dueños de las tiendas afectadas pintan un cuadro desalentador, describiendo cómo el ladrón se aproxima al exhibidor de garrafones, aparentando tomar nota de ellos para su posterior registro, solo para luego desaparecer sin dejar rastro. Una propietaria afectada compartió su experiencia:
Él toma los garrafones del exhibidor y promete regresar con ellos, pero simplemente se marcha y no vuelve... No cobra por ellos, pero en un caso sí lo hizo en una tienda de Los Frentes
La difusión del video del incidente ha provocado una ola de indignación en las redes sociales, donde los usuarios han condenado enérgicamente la conducta del individuo, etiquetándolo como un "estafador" que se aprovecha de la confianza depositada en los trabajadores de las tiendas de abarrotes. Los cálculos preliminares de los propietarios sugieren que las pérdidas económicas podrían ascender a cifras significativas, alcanzando hasta los 500 pesos diarios.
Este incidente evoca recuerdos de un suceso similar ocurrido en 2018, cuando un empleado de una panadería reconocida fue sorprendido en video robando productos mientras supuestamente realizaba labores de organización en la tienda. En ese entonces, la empresa tomó medidas disciplinarias, despidiendo al empleado y emitiendo una disculpa pública.
Las autoridades locales han tomado conocimiento de este nuevo caso de robo y han iniciado una investigación exhaustiva al respecto. En tanto, instan a los comerciantes y residentes de la zona a permanecer alerta y reportar cualquier actividad sospechosa que observen, en aras de salvaguardar la seguridad y el bienestar de la comunidad.
Fuente: Tribuna