Ciudad de México.- El pasado sábado, 4 de mayo, Juan Carlos A., de 57 años, fue baleado en el interior de un pequeño taller de carpintería que había adaptado en el interior de su casa. Según algunos testigos, en el momento en que ocurrió el incidente, uno de los sicarios le confesó que había sido enviado por alguien llamado Jesús Gabino, nombre de su excuñado, quien lo habría amenazado de muerte hace ya varios años.
De acuerdo con algunos informes, Juan y Jesús no solían tener una buena relación, incluso llegaron a sostener una riña por un predio; sin embargo, en determinado momento, el ahora occiso se fue a vivir a Sonora por algún tiempo y no fue sino hasta hace unos días que regresó a vivir a la alcaldía Gustavo A. Madero, en la colonia Felipe de Jesús, más exactamente en una casa ubicada en la calle 16 de Septiembre.
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Alrededor de las 17:00 horas del pasado sábado, dos sujetos arribaron al mencionado taller a bordo de una motocicleta. Antes de abrir fuego en contra de Juan Carlos, uno de los agresores exclamó: “Esto va de parte de Jesús Gabino”, para luego dispararle a la víctima en ambas piernas. Una vez que terminaron con su labor, los gatilleros escaparon del lugar, sin que hasta el momento se sepa algo sobre su ubicación o identidad.
Mientras tanto, Juan fue trasladado por sus familiares al Hospital General de la Villa, donde momentos más tarde se determinó que ya no contaba con signos de vida, por lo que procedieron a certificar la muerte del masculino. Reportes indican que la víctima falleció debido a la gravedad de las heridas que sufrió en ambas piernas. De acuerdo con lo dicho por algunas fuentes allegadas al agraviado, Jesús Gabino era el nombre del excuñado del carpintero, por lo que se estima que cumplió su promesa de quitarle la vida, aunque esto no ha sido confirmado todavía.
¿Cuál es la pena por homicidio en la Ciudad de México?
El crimen de homicidio ocurre cuando alguien priva de la vida a otra persona y se trata de un delito que se persigue por oficio. Según información datos del Artículo 135, quien resulte responsable de ilícito podría hacerse acreedor a una pena de entre 12 a 20 años de prisión, así como también tendrá que pagar una multa que podría ir desde los 860 a los mil 440 días de salario, a manera de compensación por los daños cometidos.
Fuentes: Tribuna