Nogales, Sonora.- Durante el transcurso de este sábado 18 de enero de 2025, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES) confirmó la vinculación a proceso para un hombre, identificado como Jesús Ramón 'N', de 23 años de edad, por su probable participación en el delito de violencia familiar equiparable en agravio de Erika Danitza 'N', de 38 años. Esto después de que la autoridad competente presentó las pruebas contundentes ante el juez de control que fue el encargado de llevar a cabo la audiencia del caso.
De acuerdo con el boletín informativo presentado por la Fiscalía de Sonora, el hecho que se le imputa al joven data del pasado 29 de junio de 2025 y tuvo lugar en un domicilio ubicado en la colonia Lomas de Anza, en el municipio de Nogales, Sonora. Las investigaciones correspondientes indican que el sujeto se presentó en la vivienda de la víctima, con quien mantenía una relación sentimental y comenzó a agredirla físicamente.
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Sin mediar provocación, la agredió físicamente con dos cachetadas en el rostro e irrumpió en su vivienda; horas después, regresó al lugar, profiriendo insultos y causando más daño, incluido el uso de un acelerante de fuego contra la mujer en un intento de intimidación", se puede leer en el informe que compartió la dependencia estatal en sus redes sociales.
Después de una exhaustivo análisis de las pruebas, el juez de control decidió determinar la vinculación a proceso bajo los términos presentados por la Fiscalía sonorense. También, la autoridad dictó la prisión preventiva como medida cautelar para el imputado con la finalidad de salvaguardar la seguridad de la fémina afectada y así poder garantizar el desarrollo del proceso penal sin interferencia alguna que pueda interferir en la indagatoria pertinente.
Finalmente, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora reafirmó su compromiso con la atención a víctimas y la erradicación de la impunidad en delitos que atentan contra la dignidad y el bienestar de las mujeres, logrando de esta manera salvaguardar el derecho a una vida fuera de cualquier tipo de violencia.
Fuente: Tribuna