Cuautitlán, Estado de México.- La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) dio una actualización sobre el esclarecimiento de la muerte de un sacerdote, identificado por las siglas Ernesto Baltazar Hernández Vilchis, quien había sido reportado como desaparecido a finales de octubre en el municipio de Tultitlán. Como resultado de las indagatorias presentadas por el Ministerio Público, la autoridad judicial determinó la vinculación a proceso de los presuntos implicados, dictando además prisión preventiva y estableciendo un plazo de 3 meses para el cierre de la investigación complementaria.
Los imputados, identificados como Brandon Jonathan 'N', María Fernanda 'N' y Fátima Isabel 'N', enfrentan cargos por su probable participación en los delitos de desaparición de persona y homicidio calificado. La resolución judicial se basa en los datos de prueba que, según el juez, permitieron establecer "se tiene por acreditado tanto la probable intervención, así como la conducta que los agentes activos desplegaron a efecto de materializar la conducta delictiva".
La carpeta de investigación iniciada tras la denuncia de desaparición presentada por los familiares de la víctima el pasado 31 de octubre permitió reconstruir la cronología de los eventos. Las diligencias establecieron que el día 29 de octubre, la víctima, de 43 años de edad, salió de su domicilio a bordo de su vehículo particular. Se dirigió hacia un inmueble localizado en la Unidad Habitacional Morelos, Tercera Sección, en el municipio de Tultitlán. Al lugar arribó en compañía de Fátima Isabel 'N', persona con quien el clérigo mantenía una relación de confianza.
En el interior del domicilio ya se encontraba Brandon Jonathan 'N'. De acuerdo con las pesquisas, la víctima convivió durante varias horas con ambas personas, periodo durante el cual se consumieron bebidas alcohólicas y estupefacientes. En un momento determinado, Brandon Jonathan 'N', presuntamente con el conocimiento de Fátima Isabel 'N', agredió físicamente al sacerdote utilizando un objeto contundente, provocándole lesiones que derivaron en su fallecimiento.
Posteriormente, al lugar de los hechos arribó María Fernanda 'N', identificada como pareja sentimental del agresor. Las investigaciones señalan que los tres implicados colaboraron en la manipulación de la escena para ocultar el crimen. Utilizando cobijas y bolsas, envolvieron el cuerpo y lo ataron a un sillón para facilitar su traslado. Finalmente, llevaron los restos hasta el municipio de Nextlalpan, donde fueron abandonados en un canal de aguas negras.
Hallazgos forenses y proceso judicial
El avance de la investigación llevó a la ejecución de una técnica de investigación de cateo el pasado 9 de noviembre en el domicilio de la Unidad Habitacional Morelos, bajo un mandamiento aprobado por la autoridad judicial. En el sitio, peritos y agentes de investigación localizaron indicios clave que vinculaban el lugar con el crimen. Entre los objetos encontrados destacaron pertenencias personales de la víctima, una estola propia de su oficio sacerdotal, así como instrumentos punzocortantes y contusos. Asimismo, mediante la prueba química forense conocida como 'blue star', se detectaron rastros hemáticos que habían intentado ser limpiados.
La Fiscalía sostiene que existe evidencia suficiente para demostrar el dolo en la conducta de los acusados. Se determinó que Brandon Jonathan 'N' y Fátima Isabel 'N' ejecutaron los actos privativos de la vida sin correr riesgo alguno, mientras que María Fernanda 'N' auxilió en las labores de limpieza, eliminación de huellas dactilares y ocultamiento del cadáver. La autoridad judicial concluyó que "se encuentra legalmente acreditado el hecho delictuoso de homicidio agravado".
Es relevante mencionar que la detención de los implicados se dio de manera escalonada. El 14 de noviembre se cumplimentó la orden de aprehensión contra Fátima Isabel 'N' por el delito de desaparición, siendo ingresada a un penal. Brandon Jonathan 'N' y María Fernanda 'N' también fueron detenidos e ingresados previamente por el mismo hecho. Posteriormente, se les notificó el mandamiento judicial por el delito de homicidio calificado.
De acuerdo con el Código Penal vigente en el Estado de México, el homicidio doloso, bajo las agravantes presentadas y fundamentadas en los artículos 241, 242 y 245, entre otros, podría conllevar una penalidad de hasta 70 años de prisión para los responsables, una vez que concluya el proceso judicial y se dicte sentencia definitiva.
Fuente: Tribuna del Yaqui
