Hermosillo, Sonora.- La Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES) comenzó con el proceso de análisis e identificación de los restos humanos hallados por el colectivo Guerreras Buscadoras de Cajeme a las afueras de Ciudad Obregón. Rómulo Salas Chávez, titular de la Fiscalía, confirmó que los trabajos forenses ya están en marcha con al menos 20 osamentas encontradas en fosas clandestinas del Valle del Yaqui.
Detalló que, tras el descubrimiento, personal de servicios periciales acudió al sitio para realizar el procesamiento de campo. La evidencia ya fue trasladada a los laboratorios para su estudio. La fase actual, descrita como "trabajo de gabinete", está a cargo del departamento de antropología. Los especialistas se enfocarán en determinar el número de individuos a los que corresponden los restos, su sexo, la temporalidad aproximada de la muerte y las posibles causas.
Este procedimiento tiene un doble objetivo; el primero es lograr el reconocimiento pleno de las víctimas para notificar a sus familiares y entregarles los restos de manera digna, brindando así certeza a las personas que los buscan. Paralelamente, la información obtenida será la base para iniciar una investigación formal que pretende esclarecer las circunstancias de los decesos y proceder a la dar con quienes resulten responsables de estos hechos.
En el marco de una jornada de búsqueda de cuerpos de personas en calidad de desaparecidas, el colectivo Guerreras Buscadoras de Cajeme realizó en 1 semana el hallazgo de 20 osamentas. El descubrimiento tuvo lugar en un predio que se ubica por la calle 400 y Kino, lugar en el que ya se han encontrado cuerpos de personas desaparecidas, razón por la cual continuarán realizando las búsquedas en el sitio que se ha convertido prácticamente en un cementerio clandestino.
De acuerdo a las buscadoras, la jornada inició el pasado lunes, tras recibir una denuncia anónima sobre un sitio que era utilizado como punto de inhumación, mismo que pudiera albergar aproximadamente 50 cuerpos. En este lugar, en donde las víctimas fueron enterradas a una considerable profundidad, se necesitó de una retroexcavadora para localizar los restos que se detectaron en diferentes fosas.
Fuente: Tribuna y FGJE Sonora
