Nogales, Sonora. - En Nogales, Sonora, Esther Consuelo Macías Mejía, administradora de la Casa de la Misericordia y de Todas las Naciones, reveló que la mayoría de las personas migrantes albergadas en dicho refugio son familias encabezadas por mujeres solas con hijos.
Macías Mejía destacó que esta situación ha llevado a que la población infantil represente entre el 60 y 65% del total de personas albergadas en las instalaciones, que desde hace más de un año se encuentran saturadas, con un cupo de 125 personas y una larga lista de espera.
De acuerdo con la administradora, solo alrededor del 30% de la población migrante en el refugio son familias completas, donde el padre se encuentra presente junto con los hijos, mientras que el resto son mujeres que han llegado con sus hijos, incluso algunas provenientes de países extranjeros.
Esta estadística refleja una tendencia preocupante: cada vez más mujeres migrantes están huyendo solas con sus hijos, no solo por la violencia ejercida por grupos criminales en su contra, sino también por la violencia doméstica perpetrada por sus propias parejas sentimentales, como han corroborado en entrevistas realizadas en el refugio.
Macías Mejía compartió que muchas de estas mujeres llegan emocionalmente destrozadas al refugio, confiando en que encontrarán un lugar seguro para ellas y sus hijos. Han vivido experiencias desgarradoras y solo la seguridad de sus hijos las ha mantenido luchando.
Gracias a Dios, aquí lloran con nosotras y sacan todas esas amarguras que traen a cuestas porque se sienten seguras después de tanto tiempo de sufrimientos soportados", expresó la administradora.
El perfil de los migrantes albergados en la Casa de la Misericordia y de Todas las Naciones incluye en su mayoría a mexicanos, principalmente de Guerrero y Michoacán, así como un 20% de personas extranjeras provenientes de diversos países, incluyendo una familia de China.
Ante esta realidad, el refugio continúa brindando apoyo y atención integral a estas familias vulnerables, en su lucha por una vida mejor y más segura.
Fuente: Tribuna