Etchojoa, Sonora.- A pesar de la restricción de siembra en el valle del Mayo, la quema de gavilla continúa siendo un peligro constante para los vecinos de los predios agrícolas, quienes incluso ya han resultado intoxicados por el humo que invade sus casas.
Para este ciclo agrícola, más del 70 por ciento de las hectáreas del valle del Mayo quedó sin sembrar por falta de agua y se esperaba que los productores dejaran atrás la quema de gavilla para elaborar pacas de alimento para el ganado, sin embargo no fue así.
EL PROBLEMA
Una de las regiones más afectadas por esta práctica es el municipio de Etchojoa, donde año con año promedia hasta 40 quemas al mes y este año no fue la excepción.
Según los reportes del Departamento de Bomberos, este fin de semana se registraron dos grandes quemas de gavilla que afectaron alrededor de 80 hectáreas y dejaron como saldo a siete personas intoxicadas.
Reinaldo Amarillas Meza, director de Bomberos Etchojoa precisó que durante la tarde de este domingo se registró el incendio intencional de 40 hectáreas en la colonia 13 de octubre y debido a la cercanía del predio con las casas, una mujer de 45 años resultó intoxicada por el humo.
Mientras que el segundo siniestro se registró en la comunidad de Guayparín, donde la quema de 40 hectáreas dejó como saldo a seis personas intoxicadas, debido a que durante más de cuatro horas, las familias estuvieron inhalando humo en sus hogares.
Estamos muy molestos porque normalmente las quemas se presentan en lugares retirados, por lo que no sólo nos hacen gastar combustible, sino que lo más grave es que tienen a las pipas y a los muchachos ocupados, por lo que en caso de que se presente algún accidente grave pues no podremos llegar a tiempo”, afirmó.
Fuente: Tribuna Sonora
