San Francisco, Estados Unidos.- Recientemente, un quipo de científicos de la Universidad de California, en San Francisco, Estados Unidos, realizó un estudio que determinó que el uso de cigarrillos electrónicos podría causar la misma cantidad de daños al corazón que fumar con un cigarro tradicional. Los resultados de sus indagatorias fueron publicados a través de la revista Arteriosclerosis, Thrombosis and Vascular Biology de la Asociación Americana del Corazón.
Según información del National Institute on Drug Abuse, los cigarrillos electrónicos son dispositivos a pila con los que se puede inhalar vapor que, usualmente contiene nicotina, saborizantes y otras sustancias químicas. Regularmente se les puede ver con forma de un cigarro común, pipas, bolígrafos y hasta de memorias USB, estos dos últimos diseños son los que utilizan los estudiantes. El mismo instituto menciona que este artefacto es sumamente popular entre los adolescentes, principalmente en Estados Unidos, esto es debido a que son de fácil obtención.
Lamentablemente, el uso de este artefacto también puede traer consecuencias a la salud de los menores, a largo plazo, esto según datos de la Universidad de San Francisco, donde descubrieron que los también conocidos como vapeadores podían generar daños en el corazón. Para llegar a esta conclusión, los científicos hicieron dos estudios; uno en ratones y otro en personas. Al final de la investigación descubrieron que el uso de cigarrillos electrónicos genera un daño en los vasos sanguíneos, tal como un cigarro tradicional lo haría.
Es menester mencionar que si los vasos sanguíneos se ven afectados, la sangre oxigenada no puede viajar al corazón, alrededor del cuerpo y los tejidos. Según información del medio británico, Daily Mail, las células endoteliales recubren los vasos sanguíneos y mantienen la fluidez de la sangre, este proceso ayuda a regular el flujo sanguíneo y controlan la permeabilidad de la pared de los vasos generando óxido nítrico.
Por otro lado, el autor del estudio, el doctor Matthew L. Springer, quien es profesor en la división de cardiología de la Universidad de California de San Francisco reveló que intentaron retirar componentes para ver si había alguna opción saludable para los consumidores de vapeo, pero esto no fue así: "Nos sorprendió descubrir que no había un solo componente que pudiera eliminarse para detener el efecto dañino del humo o vapores en los vasos sanguíneos. Mientras haya un irritante en las vías respiratorias, la función de los vasos sanguíneos puede verse afectada".
Fuentes: Tribuna