Buenos Aires, Argentina.- Recientemente la famosa y querida modelo argentina, Romina Bellucio, dejó a más de uno con la boca abierto, al haber abierto su corazón por primera vez al revelar la terrible enfermedad incurable que le fue detectada hace más de una década y que le remontó a hace tres años, declarando que desgraciadamente las bacterias de este se alojaron en su cerebro y en su corazón, narrando el infierno que vivió.
Como se sabe, el Lyme es una enfermedad muy difícil de diagnosticar, pero que en los últimos años ha tenido un foco importante, debido a que la padecen celebridades como, Avril Lavigne, Justin Bieber, Thalía y Bella Hadid, misma que la propia Bellucio explicó que: "Se contagia por la picadura de una garrapata infectada con la bacteria de la borrelia. Es una multisistémica, conocida también como 'La gran imitadora'", debido a todas las afectaciones que tiene.
Y ahora, este domingo 19 de noviembre, la modelo Argentina a través de su cuenta de Instagram compartió su dura experiencia con esta enfermedad que no tiene cura comenzando con: "En su primera etapa me atacó de forma muy agresiva y entre los efectos tenía fatiga severa, pérdida de memoria a corto plazo, dificultad para concentrarme, ansiedad, insomnio, estatus migrañosos, dolor articular, debilidad muscular e intolerancias alimenticias varias. Todas muy dispares y para volverse loca".
Ante este hecho agregó que visitó un sin fin de médicos que no lograban nada, recordando que: "Durante dos años visité docenas de médicos por toda España, sin conseguir diagnóstico alguno. En ese tiempo mi salud cayó en picado, las bacterias se alojaron en mi cerebro, en mi corazón y en mi estómago, dejando mi sistema inmunológico a cero, y creándome muchas coinfecciones, hasta el punto de pasar días sin poder levantarme de la cama a causa de los intensos dolores y, cuando lo conseguía, necesitaba treinta minutos para ponerme de pie".
Al ser un padecimiento del que poco se conocía y que coincidió con el nacimiento de su segundo hijo, Enzo, lamentablemente "los médicos achacaban las dolencias a su estado tras el alumbramiento. Finalmente, un gran clínico de Madrid supo dar con el problema en cuestión y pude empezar a luchar para recuperar mi vida", señalando que ha logrado tanto gracias a su marido, Guti, que no le ha soltado la mano nunca.
Finalmente, declaró como vive hoy día con su enfermedad, declarando que: "sigo mi lucha con mis tratamientos en Bélgica, cuidando muchísimo mi descanso, mi alimentación orgánica y, siempre que puedo, manteniendo los niveles de cortisol bajos. Algo fundamental en mi recuperación es el ejercicio de fuerza, que a mí me da la energía que muchos días necesito. Todo lo hago escuchando mucho a mi cuerpo, ya que es tu prioridad y no hay que dejarlo para luego".
Fuente: Tribuna del Yaqui
