Estados Unidos.- Dune y Dune: Parte Dos, dirigidas por Denis Villeneuve, se han convertido en dos de las películas más destacadas de la última década. Sin embargo, mientras la segunda entrega sigue cosechando elogios, una criatura en particular ha llamado la atención de muchos: la terrorífica araña de la guarida del barón Harkonnen. Este ser grotesco, que causó más de una pesadilla en los espectadores, tuvo un diseño original aún más espeluznante del que nunca llegamos a saber en detalle.
Aunque la araña gigante, con manos humanas en las extremidades de sus largas patas, nunca se menciona en la novela de Frank Herbert, su presencia en la primera película dejó una impresión indeleble. Pero resulta que el diseño que vimos en la pantalla grande era en realidad una versión atenuada de lo que podría haber sido. El estudio de efectos especiales Weta Workshop compartió recientemente en ArtStation dos diseños alternativos para la araña, y ambos son lo suficientemente aterradores como para provocar escalofríos.
Uno de los diseños presenta un rostro humano calvo, similar a uno de los lacayos del barón Harkonnen, mientras que el otro tiene un rostro más insectoide, con ojos saltones y brazos diminutos. Ambas versiones son aún más espeluznantes que la criatura que finalmente vimos en la pantalla grande.
Aunque el origen exacto de la araña Harkonnen en el universo de Dune sigue siendo un misterio, algunos teorizan que podría ser una creación de Bene Tleilax, un grupo secreto conocido por sus experimentos genéticos. Dada la relación entre los Harkonnen y los tleilaxu, no sería sorprendente que el barón tuviera acceso a tales creaciones grotescas.
Aunque Villeneuve no menciona a los Bene Tleilax por su nombre en sus películas, hay indicios en Dune: Parte Dos que sugieren adaptaciones de las historias posteriores de Herbert. Si se llevan a cabo secuelas, es posible que los tleilaxu desempeñen un papel más importante, lo que podría arrojar luz sobre la verdadera naturaleza de la araña Harkonnen.
Aunque el diseño original de la araña nunca llegó a la pantalla grande, su existencia nos ofrece una visión única del proceso creativo detrás de una de las criaturas más terroríficas del universo de Dune. Y mientras esperamos la posible claridad sobre su origen en las futuras entregas, seguimos asombrándonos con la imaginación y el ingenio que dan vida a estas monstruosidades en la pantalla grande.
Fuente: Tribuna