Ciudad de México.- En una conversación profunda con Marco Antonio Regil, Kalimba abrió su corazón para hablar sobre el blindaje emocional que recibió de su padre desde niño, y que ahora transmite a sus propios hijos. El cantante compartió cómo ha enfrentado el racismo, el bullying y las bromas pesadas, no desde la confrontación, sino desde el conocimiento de su identidad y el poder de la conciencia.
"Yo creo que lo mejor es explicar que existe la maldad humana. Porque el corazón tiene maldad. Tenemos libre albedrío, y en ese libre albedrío hay personas que deciden ver a alguien en la calle, bajar la ventana y dar un peso, y hay personas que deciden subir la ventana para no verlo. Ese es el corazón, así decide", expresó Kalimba, al hablar sobre cómo prepara emocionalmente a sus hijos ante la posibilidad de ser discriminados.
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El cantante también compartió cómo ha aprendido a distinguir entre el cariño y el insulto cuando se refiere a su color de piel. "Hay personas que deciden decirme negro con mucho cariño: 'Mi negro, ¿Cómo estás?', y hay personas que lo utilizan intentando insultar. Si yo observo desde qué tipo de corazón viene, listo, ya lo sé", explicó.
Uno de los pilares de su fortaleza emocional es el conocimiento de su identidad. "Yo soy negro por mi raza, que en realidad soy mulato porque tengo mamá blanca, ¿no? Pero me considero negro, y cuando hablo de eso lo hago con naturalidad", dijo. Para Kalimba, la clave está en entender que ser negro, blanco, chino o pelirrojo son expresiones de diversidad, no de inferioridad.
"La gente se agarra de la ignorancia", reflexionó. "Alguien se me acercaba y me decía: 'Tú cállate, negro.' Y yo decía: 'Órale, qué padre. Me dijo negro.' Como yo no soy ignorante, ser negro significa muchas cosas maravillosas, como ser blanco, como ser pelirrojo, como ser lo que quieras. Si todavía me dices negro, yo pienso en todas las ventajas que tiene ser negro".
Kalimba también compartió una poderosa enseñanza que recibió de su padre cuando era niño, tras una pelea en la escuela. "Mi papá me regañó a mí. Me dijo: 'La única manera en la que alguien pueda ganarte una pelea es en la mente'. Las palabras no tienen el poder de herir. La ignorancia tiene el poder de herir. Si tú me dices palabras, no me voy a despertar mañana enfermo. No me va a pasar nada si yo no lo permito".
Con estas reflexiones, el integrante de OV7 no solo honra el legado de su progenitor, sino que ofrece una guía emocional para sus hijos y para quienes enfrentan el racismo desde la infancia. Su mensaje es claro: El poder está en conocerse, en entender desde dónde vienen las palabras, y en no permitir que la ignorancia defina el valor de una persona.
Fuente: Tribuna del Yaqui/Agencia México
