Ciudad de México.- Flor Rubio es una reconocida periodista de espectáculos mexicana, quien actualmente, además de formar parte de Grupo Fórmula, tiene un programa titulado Dulce y Picosito, que se transmite de lunes a viernes a las 18:30 horas en YouTube y Facebook Live. De hecho, su contenido se centra en el mundo del entretenimiento y en las noticias más destacadas de los famosos.
Primeramente, sobre la comunicadora se sabe que su nombre completo es Flor María Natividad Rubio Loya y nació el 5 de agosto de 1971. Desde hace 20 años está casada con Rafael Martínez y tiene dos hijos, Flor y Rafael. Sobre su pareja no hay mucha información, más que el amor que se han profesado el uno al otro en numerosas ocasiones, pues la misma conductora ha dicho que él es su fortaleza.
Este pasado lunes 14 de julio, Rubio Loya vivió un momento realmente embarazoso en su show que muchos usuarios aún no pueden olvidar y las burlas en la web no se dejaron esperar. No se trató de una polémica ni confrontación con alguna celebridad, la protagonista esta vez fue la misma Flor. Mientras daba inicio a los temas actuales, de pronto algo inesperado la sonrojó por completo.
Un audio atrevido
En pleno programa se empezó a escuchar un audio que, por los sonidos que todos lograron identificar, claramente pertenece a un contenido para adultos. En ese preciso instante, la excompañera de Juan José Origel se puso muy nerviosa y tuvo que intervenir primero con un escueto: “¡Ay Dios mío!” y después su colaborador exclamó: “Tenemos un audio que se nos está colando, buenas tardes a todos, para que vean qué bonito estamos iniciando la semana”.
“¡Me va a dar, me va a dar!, bienvenidos dulcilivers… bueno, les damos la bienvenida con este audio que nuestro travieso productor, no sé si lo está poniendo o si se le está escapando, pero bueno, es un audio muy atrevido, no propio para lunes, porque el lunes nada de nada, Joel…”, mencionó entre risas.
Se dice que la computadora de donde salió el material pertenece a su marido, Rafael. No obstante, respecto al bochornoso episodio, la presentadora y su colaborador Joel no les quedó más que admitir que efectivamente esos ruidos eran gemidos. A pesar de que intentaron tomárselo con humor, los internautas no pensaron lo mismo, pues en redes sociales la están criticando duramente.
Fuente: Tribuna
