Ciudad de México.- La reconocida actriz de Televisa mexicana, Oyuki Manjarrez, acaba de brindar una entrevista en la que sorprendentemente reveló que hace mes y medio fue sometida a delicada cirugía, para la que tuvo meses de preparación específica, ya que debía de realizar un trasplante de riñón, ¿será acaso que la estrella de melodramas estuvo al borde la muerte y luchó en secreto?
La realidad es que Manjarrez, no tenía que recibir el trasplante, sino que era donadora, pues en una de las más claras muestras de amor puro e incondicional, le donó un riñón a su esposo, Arturo Granados, quien sufría de una severa insuficiencia renal, por lo que era importante recibir el órgano. Lo más importante de su relato, es que en realidad no es compatible al no tener el mismo tipo de sangre, pero para lograrlo hizo toda una serie de sacrificios por largos nueve meses, culminando el pasado 16 de mayo, cuando entraron a cirugía.
Oyuki se mostró conmovida porque a lo largo de los nueve meses en los que se prepararon, recibió el apoyo de varios amigos del mundo del espectáculo, futbolistas, incluso de la fundación del Dr. Simi. La actriz de Dos Mujeres, Un Camino, contó que aunque no era compatible no se rindió, pues sabe que miles de personas esperan un órgano y a veces pueden que no resisten hasta encontrar al adecuado, por lo que investigó para poder ser donadora, y descubrió que no generaba anticuerpos.
Ante esto, descubrió importantes programas de donación cruzadas, que es cuando dos o más parejas de donantes y receptores no son compatibles entre sí, pero hacen intercambio y donan al receptor de la otra pareja, pero que por desgracia en México no son comunes, pues la gente al final se arrepiente y tuvo que donar directamente: "Fuimos con un notario para manifestar mi voluntad. No teníamos Seguro Social, pero trabajé en una empresa y pude meterlo como beneficiario para ver si lo atendían en Nutrición. Empezamos el proceso. Es horrible. La gente no sobrevive si espera a tener un órgano compatible".
De acuerdo con datos del Centro Nacional de Tasplantes (CENATRA), en México hay más de 16 mil pacientes que esperan un riñón. Arturo no tiene hijos, pero sí hermanos. Cuando les habló de la posibilidad de donarle un riñón, le dijeron: 'No participamos'. Uno dijo: 'Te hago un préstamo'. Yo le comenté: Puedes deducir impuestos por la página gofundme (https://www.gofundme.com). Dijo que no, que le valía m4dr3s. Le dijo a mi marido que le prestaría 45 mil pesos y a la mera hora lo dejó plantado", contó.
Eso no fue todo, ya que contó que este tipo de trasplante es más caro que el de un donador compatible, ya que debía hacer una plasmaféresis, eliminación de anticuerpos que tenemos en la sangre, que solo con eso fueron casi 400 mil pesos, otros 80 mil en otro proceso de medicación, albúmina que costaba mil 200 pesos cada uno y de los que ocupó 39, señalando que lloró mucho en este procedo, pues sale en hasta 3 millones, pero gracias a donaciones de fundaciones como Sólo por ayudar, que donó 50 mil pesos, el club de rotarios de Cuajimalpa, que dió 80 mil pesos, y la Fundación Hospitales Mac, que aportó más de 300 mil pesos como parte de su programa de trasplante renal, pudo completar para hacer la cirugía.
Aún debemos 45 de los 95 mil pesos de honorarios médicos. Fundación Simi nos apoyó con 25 mil pesos para comprar una vacuna para que no rechazara el riñón. José Elías Moreno, Sugey (Abrego) y Arleth Pacheco me contactaron con ellos", agregó.
Finalmente, narró que estuvo siete horas en cirugía, pues hubo algunas complicaciones, pero que al final todo salió bien, recalcando que con esto se hizo más tangible para ella que Dios es grande. Sobre las secuelas, declaró que los primeros días tuvo mucho dolor, que se cansa mucho y en los próximos cuatro meses no podrá cargar cosas pesadas, y que su esposo deberá de tomar inmunosupresores de por vida para evitar el rechazo del órgano.
Fuente: Tribuna del Yaqui
