Ciudad de México.- La reconocida actriz y presentadora mexicana, Ceci Ponce, acaba de brindar una entrevista para TV Notas, en la que revela que su hija mayor, Celeste Arroyuelo, se fue, señalando que ella ante esto está pasando por un "proceso de duelo", debido a que ella está tratando de asimilar que "el ser amado ya no está" y en su lugar deberá de vivir con otro al que aprende a amar igual de profundo.
En el año del 2022, la hija de Ceci fue criticada por haber usado un traje con corbata en uno de los eventos públicos de su madre, a lo que la exactriz de Televisa salió en su defensa y dijo que apoyaba en todo a su pequeña, incluso si en un futuro decidió cambiarse de género. Ahora, a tres años de estas palabras de amor y apoyo, Ceci ha confesado que Celeste ahora es "su hije" y que ha pedido ser llamado Milo, y que a sus 14 años de edad, vive un proceso de transición de género que apoya.
Ponce declaró en entrevista para TV Notas, que el saber esta situación no fue una sorpresa para ella, porque siempre supo había algo en esa pequeña que le hizo saberlo, en especial cuando le comentó sentirse diferente y que le gustaría cambiarse el nombre, destacando que jamás le ha impedido ser él mismo: "Le respondí: 'claro, cuando tú digas'. Me enjuicio más a mí que a todo lo que está a mi alrededor. De niña jamás tuve distinción de sexo, raza, condición económica o clases (sociales). Los humanos son seres espectaculares".
En cuanto a su exesposo y padre de Milo, Eduardo Arroyuelo, mencionó que trata de ser muy empática, porque sabe que vive un proceso propio diferente al de ella, porque sabe que es un tema más complejo para ellos y por eso deja que todo fluya de una manera en que todos estén cómodos y apoyen a su hijo: "Sé que para muchos padres es algo muy complejo, pero para mí no lo es. No presenta un problema de nada. Mi hijo Milo está viviendo su proceso y creo que tiene que vivirlo. De igual forma hacía su papá, porque no quiere hablar tanto de esos temas. Es algo delicado".
Ante esto, la exparticipante de Survivor México, declaró que para ella, lo que atravesó su hijo es una "disforia de género" que va más allá de sentirse muy gordo o muy flaco", y es solo que no se siente a gusto con el cuerpo con el que nació, y ahora, ella apoya que busque ese cuerpo correcto para él: "Yo veo a Milo y no veo nada raro o diferente. Entiendo por lo que atraviesa. A veces la gente me pone que es una ‘moda’. Les aseguro que nadie quisiera pasar por un proceso de transformación por una moda. Es algo más profundo".
La adolescencia es un proceso difícil. Él tiene una terapeuta, sexóloga y especialista en cuestiones de temas de transgénero. Le da un acompañamiento. De mi parte lo escucho y hablo con él. Hay mucha comunicación entre nosotros. Aunque debo decirles que no es fácil, sobre todo por los anhelos que uno construye de imagen. Es complicado e incómodo encajar en un cuerpo que no es tuyo. El amor de mamá elimina fronteras y es una capa protectora", agregó.
Finalmente, Ponce quiso dejar en claro que el motivo que para ella es como una especie de duelo, es porque es como la pérdida de su hija, es el hecho de saber que Celeste ya no está y no va a volver, pero que también es el nacimiento de un hijo, y se siente preparada para este cambio y para amar profundamente a este nuevo ser: "Las mamás que han pasado por este proceso me van a entender que hay un duelo. No por las ilusiones de nietos o por otra cosa. No soy una mamá que piense así. Es un duelo por el ser que ya no está. Lo único que hice fue buscar información y especialistas para entender muchas cosas".
Cuando era chiquita la vestía de rosa chicle, tules y moños. Después a los siete años él comenzó a vestirse de negro. Luego fue holgando la ropa y se cortó el pelo. Algo que no se me hizo raro, porque yo siempre fui muy masculina. Con el tiempo me volví femenina. Todos tenemos una parte masculina y femenina", concluyó.
Fuente: Tribuna del Yaqui
