Ciudad de México.- En la euforia por el título de Argentina en el Mundial de Qatar 2022, los jugadores y sus familias podrían haber cometido una falta a las reglas de le Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) por haber tocado la Copa del Mundo, algo que solo esta permitido a un número exclusivo de personas; sin embargo, esto no se habría cumplido el día de la premiación.
Tras la victoria FIFA entrega el trofeo real de la Copa del Mundo a los futbolistas ganadores, quienes levantan el trofeo y se toman fotografías. Este derecho es exclusivo de los jugadores campeones y en otras circunstancias también es permitido a los jefes de estado y al presidente del máximo organismo del futbol en turno; sin embargo se pudo ver que por ejemplo, Antonella Roccuzzo, esposa de Leo Messi, tocó y levantó el trofeo.
En sus redes sociales dio cuenta de esto y subió varias fotografías del momento, lo que podría trae una sanción del máximo organismo, aunque en realidad no se ha pronunciado al respecto. Pero Antonella no fue la única en hacer eso, pues el chef turco conocido como 'Salt Bae' también estuvo en el campo durante la ceremonia de premiación e hizo lo mismo, en su cuenta de Instagram aparece una foto en la que se le ve sosteniendo la copa.
'Salt Bae' además, estuvo persiguiendo a varios jugadores para hacerse fotografías, incomodando a más de uno. En algunos videos en redes sociales se observa incluso su intento de arrebatar de las manos el trofeo y también un momento en el que golpea con un anillo la parte superior en un intento fallido por tomarla. El máximo organismo tampoco se ha pronunciado al respecto de esta situación.
En un caso similar estaría el exjugador argentino Sergio 'Kun' Agüero, quien fue parte de la ceremonia de premiación y también levantó la copa sin haberla disputado. El trofeo real ya está bajo resguardo de la FIFA y estará seguro hasta los próximos cuatro años. La selección argentina tiene ahora una réplica, misma con la que viajaron y estuvieron celebrando y que podrá colocar en sus vitrinas.
Fuente: Tribuna y Adrenalina Excélsior