Río de Janeiro, Brasil.- La Copa Libertadores agregó un nuevo nombre a su lista de campeones, pues el Fluminense de Brasil logró su primer título en el torneo continental de clubes tras vencer 2-1 a Boca Juniors en un aguerrido partido disputado en el Estadio Maracaná y que se tuvo que definir en tiempos extra. Con este trofeo, el equipo brasileño también rompe una importante sequía, pues no era campeón de un torneo desde el año 2012.
El juego, como todos los encuentros en Sudamérica, fue muy reñido y se jugó bajo un futbol fuerte que interrumpía constantemente los avances rivales. Fue hasta el minuto 36 que Germán Cano abrió la cuenta para el conjunto brasileño en una jugada que arrancó por derecha Keno quien vio a Cano solo en el centro y el argentino no lo pensó para definir con pierna derecha y así sorprender a Romero que no reaccionó a tiempo.
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Para la segunda mitad las condiciones obligaron a Boca Juniors a ir al frente y presionaron más en busca del empate, mismo que llegó al minuto 72 con Luis Advíncula que partiendo desde la derecha fue recorriendo al centro hasta encontrar un espacio y rematar de pierna izquierda bien colocado que dejó sin opción al portero. Tras un empate en el tiempo reglamentario tuvieron que jugar los tiempos extra.
El primer tiempo extra comenzó interesante con un trazo largo de Barbosa que Keno bajó de cabeza para Kennedy en la entrada del área y el delantero que acababa de entrar prendió con potencia de derecha para colocar el segundo tanto en un golazo que fue a celebrar con los fanáticos en la grada. Esa acción llevó a su expulsión, pues el árbitro le mostró la segunda amarilla y ya no jugó más. A partir de entonces esos primeros 15 minutos fueron para el olvido en términos futbolísticos.
El juego se volvió ríspido y predominaron las faltas, Fluminense parecía buscar desesperar al rival y lo consiguió en una acción que provocó la discusión de los jugadores y que terminó con un manotazo de Fabra a un rival que le provocó su expulsión directa. Así para la segunda mitad se jugó en diez contra diez. El partido pudo terminar con un gol más, pero Fluminense no aprovechó en un contragolpe.
Así finalizó el partido y Boca se quedó con las ganas de lograr su título siete en este torneo, mientras que Fluminense lo ganó por primera vez. Marcelo y Felipe Melo que terminaron su carrera en Europa para jugar en el equipo brasileño sumaron a su palmarés individual el trofeo más importante de América a nivel de clubes. Ahora el 'Flu' jugará las semifinales de la Copa Interamericana y asegura su participación en el Mundial de Clubes.
Fuente. Tribuna