Ciudad de México.- La ciudad de Estambul en Turquía vuelve a ser sede una Final de Champions League y es imposible no evocar el recuerdo del llamado 'milagro de Estambul', el partido que enfrentó al Liverpool y al Milan y que por muchos es considerado como la mejor final en la historia del torneo de clubes europeo por el emcionante partido ue brindaron ambos equipos y el épico resultado que definió al equipo ganador.
Este año repite un equipo de la ciudad de Milán y también un equipo inglés como en aquel año fue el Liverpool y el Milan quienes se enfrentaron en la Final de la temporada 2004-2005 disputada en el Estadio Olímpico Antatürk. El equipo italiano partía como favorito por su desempeño en el torneo. Dirigidos por Carlo Ancelotti contaban con un temible equipo con figuras destacadas es todas sus líneas.
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En la portería estaba Dida, en la defensa Cafú, Alessandro Nesta y Paolo Maldini, en el mediocampo Andrea Pirlo, Genaro Gattuso y Kaká, en la delantera Andry Shvchenko y Hernán Crespo. En la banca todavía tenían a John Dahl Tomasson o Rui Costa. En tanto que el Liverpool también lucía un plantel poderoso con un portero confiable como Jerzy Dudek, Sami Hyppia en al defensa, Xavi Alonso, Luis García y Steven Gerrard en el mediocampo y Milan Baros en su mejor momento en la delantera, todos dirigidos por Rafael Benitez.
Como era de esperarse fue un partidazo desde el primer minuto de juego cuando Paolo Maldini abrió el marcador. Desde entonces un ataque incesante de los rossoneri cayó sobre el arco de Dudek que salvó algunas, tuvo suerte en otras, pero no pudo hacer nada con un doblete de Hernán Crespo en los minutos 39 y 44. Con un 3-0 en la primera mitad parecía un partido totalmente definido, no era un engañoso dos a cero, sino un contundente marcador con tres goles de ventaja.
Pero la segunda parte fue del Liverpool, al 54' Steven Gerrard comenzó la remontada y dos minutos después Vladimir Smicer anotó el segundo tanto. Seis minutos de un desconcierto total de los italianos y un intenso sentido de competitividad de los ingleses fueron los ingredientes perfectos para pensar en la remontada. Al 60', Xabi Alonso anotó el gol del empate con media hora todavía por delante. Pero ya no hubo más daños y se fueron a los tiempos extra.
En la prórroga tampoco hubo vencedor y el encuentro se definió en los penaltis. Serginho inició la tanda por el Milan y falló, Dietmar Hamann anotó el primer tiro para Liverpool. Andrea Pirlo tampoco pudo anotar y Djibril Cissé no se equivocó. Dahl Tomasson anotó el primero de los italianos y siguieron con vida gracias a la falla de Arne Riise y el posterior acierto de Kaká que empató la tanda. Smicer no falló en el quinto penalti y en cambio Shevchenko erró con lo que los Reds lograron su quinto título.
Fuente: Tribuna