Ciudad de México.- El defensa mexicano Miguel Herrera Equihua era un central prometedor sobre el que la Selección Mexicana puso alguna vez sus esperanzas para renovar la zaga; sin embargo su carrera tomó un rumbo distinto y hoy en día no pudo encontrar un club en la Liga MX por lo que terminará su carrera en la Liga de Balompié Mexicano (LBM), una liga independiente en México que no está a filiada a la FIFA.
Herrera Equihua fue anunciado como flamante refuerzo del Neza FC, club que se considera como el sucesor de los Toros Neza, uno de los equipos más recordados del futbol mexicano. "Miguel Herrera Equihua, llega para reforzar la defensa central. Es un jugador de experiencia ya que su recorrido por el futbol mexicano, lo llevó hasta la selección mexicana", escribió el equipo en sus redes sociales junto a la foto del jugador ya con la playera del equipo.
"Con este tipo de contrataciones el la directiva del club contribuye con su esfuerzo para darle satisfacciones a la fiel afición", presumió el club del Estado de México que destacó su amplia experiencia en la primera división mexicana y en la selección nacional. Con este jugador cierran su plantilla de cara a la próxima temporada de la LBM que arrancará ya en tan solo unos cuantos días.
Miguel Herrera Equihua nació en Uruapan, Michoacán y formó parte de las fuerzas básicas del Pachuca. Su primer contacto con el profesionalismo fue a través del Tampico Madero de la entonces Liga de Ascenso en el 2010. Después de buenas actuaciones y haber adquirido experiencia, pasó al primer equipo de Pachuca en donde se mantuvo por cuatro años y donde llamó la atención de otros equipos y de la Selección Mexicana.
Formaba parte de una generación joven con Rodolfo Pizarro o Alfonso González y en 2014 llegó su debut con el Tri y estuvo cerca de ser considerado para la Copa del Mundo de Brasil, pero al final no entró en la lista. Un año después formó parte del plantel campeón de la Copa Oro en donde no vio ningún minuto y se quedó en la banca. Sus cualidades todavía llamaron la atención y el Monterrey decidió contratarlo, pero no tuvo el rendimiento esperado.
Así pasó al rival de la ciudad, los Tigres con los que sumó a su palmarés una Liga MX y un campeón de campeones. Un año después continuó su carrera en el Veracruz donde sufrió con el mal momento del equipo, para después pasar al León en donde se mantuvo tres años. En 2020 regresó a Pachuca en donde se había mantenido hasta ahora aunque con menos protagonismo. Ahora buscará brillar en su nuevo equipo a sus 34 años y en donde espera tener un nuevo título, pues la nueva temporada ya está por comenzar.
Fuente: Tribuna