Ciudad Obregón.- A Yaquis le había costado ser constante en títulos en los primeros años de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP), pero a final de cuentas un nuevo campeonato siempre llegaba. Eso cambió después de la temporada 1980-1981 cuando lograron proclamarse campeones del beisbol invernal por última vez en la historia. Desde entonces pasaron dos décadas para que volvieran a una final y aunque llegaron en dos ocasiones consecutivas el triunfo se les negó.
Después del subcampeonato de la 2003-2004 hubo que esperar unos años más para pensar en la disputa por el título y el momento llegó en la temporada 2007-2008, en donde una vez más se presentaron con la intención de romper la sequía. Para esto, el equipo había conformado un plantel con una base mexicana productiva y jugadores extranjeros, los suficientes para marcar una diferencia en la campaña.
De esta manera se juntaron nombres como Carlos Rivera, Jason Botts, Jorge Rafael Padilla y Justin Lehr, asi como Andrés Iván Meza, Jesús Aurelio Rodríguez y Joakim Soria, además del manager Homar Rojas. Durante la temporada regular los Yaquis cumplieron el objetivo de avanzar a los playoffs por lo que habían conseguido el primer paso. El primer rival fueron los Cañeros de Los Mochis a quienes vencieron por 2-4 en la serie. Así pasaron a las semifinales.
Ya en la antesala de la final, los de la 'Tribu' tuvieron que esforzarse para imponerse en siete partidos, 4-3 a los Tomateros de Culiacán. Una vez instalados en la serie final el siguiente rival fueron los Venados de Mazatlán. Conforme avanzó la serie la ilusión volvía a la afición y al equipo con la posibilidad de romper la sequía. Llegaron al quinto juego con un 3-1 a favor por lo que solo les restaba ganar ese partido para proclamarse campeones.
No fue de la forma más espectacular posible, pues en el último encuentro apenas ganaron por una carrera a cero en un duelo donde el duelo de pitcheo fue el protagonista. Andrés Meza, abrió el juego y fue el ganador al lanzar seis entradas completas, donde le conectaron seis hits, ponchó a cinco y dio dos de bases por bolas. La única carrera del juego corrió a cargo de Alfredo Amézaga con sencillo productor de Jorge Padilla.
Mientras que el salvamento fue de Joakim Soria. Así los Yaquis ganaron la serie 4-1 y consiguieron su cuarto título en la historia rompiendo la sequía de 27 años. Ese año representaron a México en la Serie del Caribe en donde no les fue bien, pues quedaron en el cuarto puesto en el torneo que se realizó en República Dominicana.
Fuente: Tribuna