Londres, Inglaterra.- Durante el partido entre el Preston North End FC y el Blackburn Rovers que se llevó a cabo el 22 de septiembre, Milutin Osmajic agredió a Owen Beck al morderlo en la espalda en la recta final del juego, hecho por el que suspendieron con un total de ocho partidos y además recibió una multa económica de 15 mil libras esterlinas (algo así como 385,479 pesos mexicanos).
Aunque parezca sorprendente, el árbitro de ese encuentro, Matt Donohue, no expulsó al montenegrino y solamente le mostró la tarjeta amarilla en medio de un conato de bronca entre ambos equipos. El colegiado no se percató del mordisco a pesar de que Beck le dijo lo que había pasado, ni tampoco recibió la advertencia de sus abanderados.
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El ambiente a lo largo del partido entre el Preston y el Blackburn se notaba tenso, incluso un jugador de cada conjunto terminó expulsado. El mismo Owen Beck recibió la tarjeta roja previo al encontronazo que tuvo Milutin luego de una patada que le propinó a Duane Holmes, lo cual provocó la reacción furiosa del atacante del Preston.
Sin embargo, la Asociación Inglesa de Futbol (FA, por sus siglas en inglés) decidió tomar cartas en el asunto para estudiar el caso de forma minuciosa. Luego de unos días de análisis, el organismo determinó que el delantero de Montenegro debía ser castigado por mala conducta y actitud antideportiva.
El director técnico del Blackburn, John Eustace, declaró que el defensor tiene un gran marca por el mordisco a la altura de la nuca, incluso, mencionó que su futbolista se encontraba conmocionado por la situación. Por su parte, Owen compartió una foto de la marca que le dejó el mordisco en su cuenta de Instagram.
Debido a la suspensión, Milutin Osmajic no volverá a ver actitud en el Championship inglés (segunda división) hasta el 23 de noviembre, fecha en la que su escuadra recibirá al Derby County en la cancha del Deepdale Stadium. Actualmente, el Preston atraviesa una crisis y se ubica en la posición 21, cerca de la zona de descenso.
Hay que recordar que una situación similar tuvo como protagonista a Luis Suárez, quien también agredió de esta manera a Branislav Ivanovic en 2013 y a Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil 2014.
Fuente: Tribuna