Ciudad de México.- La de Brock Purdy es una historia que parecía improbable, pasar de ser la última selección del Draft en la National Football League (NFL) a tener la posibilidad de disputar un Super Bowl y ganar su primer anillo con los San Francisco 49ers, siendo además una de las sensaciones de la liga. De culminar con éxito, sería la conclusión perfecta para un jugador que literalmente viene escalando desde lo más bajo del futbol americano profesional.
Purdy nació en Queen Creek, Arizona en 1999 y en su temporada como jugador en preparatoria llamó la atención de varias universidades. Al final eligió Iowa State University para realizar su carrera en el futbol colegial y por encima de ofertas de otras universidades como Alabama, Texas A&M o Boise State, por mencionar a algunos. Es decir, que ofertas no le faltaron. No era tan irrelevante en aquel entonces. En la universidad ganó varias distinciones individuales y sus números no fueron malos.
Te podría interesar
Lanzó para 12 mil 170 yardas en sus cuatro años de carrera, pasó para 81 touchdowns y sufrió 33 intercepciones. Su porcentaje de pases completados fue del 68 por ciento. Tras su última temporada en el 2021 decidió ir al Draft de la NFL. Ahí destacó no por algo especialmente bueno, sino por haber sido elegido al final. Así se ganó el mote de 'Mr. Irrelevant'. Las probabilidades de que trascendiera en la liga eran bajas y con San Francisco, el equipo que lo eligió, así comenzó.
Por delante de él había dos quarterbacks, Trey Lance y Jimmy Garoppolo, pero una serie de lesiones para ambos le dio la increíble oportunidad primero de ser suplente y después titular ante la lesión de Garoppolo. En los juegos que disputó de temporada regular dejó sorprendidos a propios y extraños y con la confianza a tope enfrentó los playoffs haciendo un buen trabajo hasta que una lesión evitó que completará la final de conferencia y su equipo perdió.
Para la siguiente temporada sus posibilidades parecían disminuir por la llegada de más competencia en su posición, pero una vez más se impuso y una vez más superó expectativas. Ahora tiene a su equipo en el Super Bowl. El jugador, que es el peor pagado en su posición de toda la liga y que incluso ha mencionado que ni siquiera le alcanza para pagar su renta, ahora podría ganar el que sería su primer anillo del super tazón completando una historia digna de destacar.
Fuente: Tribuna