Rusia.- Un evento de Artes Marciales Mixtas en Rusia se convirtió en escenario de un incidente insólito cuando el luchador iraní Ali Heibati agredió a la ring girl, María, en pleno octágono. La agresión ocurrió apenas momentos antes de que comenzara el combate entre Heibati y su oponente, el armenio Arkadiy Osipyan.
Mientras María realizaba su presentación sensual con la cartulina para anunciar el inicio del primer round, Heibati la agredió con una patada en la pierna derecha, cerca de la cadera. La reacción sorprendida de María y la intervención del árbitro evidenciaron la gravedad del incidente. Según reportes, la agresión se produjo aparentemente debido a la vestimenta de María, sin el velo hiyab, que incomodó al luchador iraní.
A pesar del incidente, el combate entre Heibati y Osipyan continuó, con una victoria para el armenio. Sin embargo, la indignación de los aficionados no se limitó al acto de violencia inicial. Heibati también agredió a Osipyan después del combate, lo que provocó una reacción aún más negativa de parte del público.
La empresa de MMA rusa, HFC, tomó medidas drásticas contra Heibati después de estos incidentes. No solo fue vetado de por vida de todas las competencias organizadas por la empresa, sino que también enfrentó represalias fuera del octágono, ya que los aficionados lo buscaron para confrontarlo, incluso sin la presencia de custodia.
Tras los eventos, Heibati emitió una disculpa pública a María en un video compartido en redes sociales. En el video, ambos aparecieron juntos, y María aceptó las disculpas del luchador iraní, reconociendo su arrepentimiento.
Heibati expresó su remordimiento y destacó su respeto por el género femenino, señalando que está casado y que comprende la importancia de respetar a las mujeres. También mencionó que después de la pelea, no admitió su culpa porque estaba aturdido por los golpes recibidos en la cabeza durante el combate.
En su disculpa pública, Heibati reconoció su error y expresó su arrepentimiento por sus acciones. Sin embargo, sus palabras han sido recibidas con escepticismo por algunos, quienes consideran que las disculpas no son suficientes para reparar el daño causado. Se espera que el luchador iraní asuma la responsabilidad de sus acciones y tome medidas concretas para enmendar su comportamiento en el futuro.
Mientras tanto, María ha recibido muestras de apoyo y solidaridad de parte de la comunidad de las Artes Marciales Mixtas y del público en general. Su valentía al enfrentar esta situación difícil y su disposición a perdonar a su agresor son un testimonio de su fortaleza y dignidad.
Fuente: Tribuna