Ciudad de México.- El caso del Pitcher mexicano Julio Urías está por definirse y su futuro depende de un hilo, ya que el campeón de la Serie Mundial con Los Ángeles Dodgers ha sido reincidente por casos de violencia doméstica, por lo que su carrera deportiva estaría por terminar, actualmente es agente libre y espera que las Grandes Ligas determinen su postura sobre la licencia administrativa que se le impuso hace poco más de un año.
El futuro del beisbolista mexicano está en una total incógnita, ya que desde septiembre pasado fue acusado y declarado culpable por un caso de violencia doméstica. Incluso hace algunos días se publicó en diferentes redes sociales el video en el cual se puede observar al pelotero mientras golpea a su pareja en la vía pública. En ese sentido, esta situación agravó todavía más el caso de Julio Urías y sus aspiraciones de permanecer en las Grandes Ligas.
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Será la MLB y la asociación de jugadores las que decidan sobre el futuro deportivo de Urías. Cabe destacar que se trata del primer jugador de las Grandes Ligas que tiene múltiples suspensiones por violencia doméstica. Asimismo, tiene una sanción como precedente de más de 300 juegos. Es por ello que ahora la Liga tendrá que definir un nuevo castigo. Esta decisión sentará un precedente hacia el futuro, ya que no existe un caso de un jugador que estuviera activo en las ligas mayores mientras cumplía una condena.
Cabe señalar que en 2019 Julio Urías fue suspendido por 20 juegos, sin embargo, no se presentaron cargos. Después de su arresto en 2023, el pelotero fue puesto en licencia administrativa, por lo cual terminó su temporada con los Dodgers. Esta licencia es para proteger al jugador mientras continúa la investigación sobre el arresto y una potencial violación a la política conjunta de violencia doméstica. Se debe mencionar que este recurso garantiza al jugador su salario y acumula tiempo de servicio mientras está lejos del equipo.
Julio Urías fue una pieza clave para los dodgers al conseguir el campeonato de la Serie Mundial en 2020. Sin embargo, su futuro está en el aire y no luce nada prometedor, ya que a lo largo de la historia las Grandes Ligas han suspendido a 19 beisbolistas por violar la política de violencia doméstica. Actualmente se encuentra como agente libre debido a que no se le renovó. Lo anterior lo hizo perder un contrato por 7 años y más de 300 millones de dólares.
Fuente: Tribuna