Ciudad de México.- El documental "Protagonista: La vida de José Ramón Fernández", se estrenó hace unos días a través de la plataforma Disney+, y uno de los momentos más emotivos que dejó fue cuando Christian Martinoli habló de su exjefe en TV Azteca y no pudo contener las lagrimas, al reconocer que 'Joserra', le dio la oportunidad de su vida.
La serie consta de tres capítulos, los cuales retratan las diferentes etapas que tuvo en su carrera y vida personal del longevo periodista; desde su inicio en un canal de la televisión estatal en Puebla, hasta la actualidad en ESPN, dando especial profundidad a su paso por Inmevisión, que se convirtió en lo que hoy se conoce como TV Azteca. En especial, el tercer capítulo reúne a excompañeros que han compartido foros y oficinas con 'Joserra', entre ellos David Faitelson, Hugo Sánchez, Luis García y Christian Martinoli.
Cuando se le preguntó a Martinoli sobre su experiencia trabajando con Fernández, antes de que pueda mencionar una palabra, se le corta la voz y visiblemente afectado, comentó lo siguiente: "José Ramón es esto (en referencia al llanto), eso es José Ramón, lo quiero al viejo. Sin su oportunidad, no hubiera tenido nada, no sería nada". También se unió a los elogios el periodista de TUDN, David Faitelson, el cual comentó que José Ramón es el responsable de crear a toda una generación de periodistas exitosos en la actualidad.
En el mismo capítulo, se cuenta con el testimonio de algunos de sus hijos, los cuales comentan que tuvieron una relación distante con José Ramón, pues siempre se encontraba trabajando y viajando para las coberturas de los eventos deportivos. "Claro que fue un padre para toda una generación de periodistas e incluso todavía, pues tiene más de 50 años de carrera, pero eso a mí me importa un carajo. Yo quería que mi padre fuera mío, no el de otros", comentó Juan Pablo Fernández.
No es la primera ocasión que Martinoli se expresa de manera favorable sobre José Ramón Fernández, pues en diferentes entrevistas ha comentado que trabajar con Fernández fue algo muy valioso y lo catalogó como síndrome de Estocolmo, pues aunque José Ramón era muy exigente y crudo en sus regaños, agradece las experiencias que pasó con él, pues gracias a eso, desarrolló su carácter y estilo de narración.
Fuente: Tribuna del Yaqui
