Estados Unidos.- En una nueva entrevista en Quarantined with Bruce de SiriusXM, la ganadora del Oscar, Gwyneth Paltrow comentó que después de ganar el prestigioso premio por Shakespeare in Love descubrió que no amaba tanto la actuación y se sintió desmotivada de cierta forma.
Ya que según menciona, sabía que no quería hacer eso para siempre y que después de eso, parte del brillo se "desvaneció", pues no sabía que es lo que quería hacer, pues también se sintió algo desilusionada por culpa de los señalamientos y cpmentarios negativos que venían por parte del público.
Me sentí como, bueno, ¿ahora quién se supone que soy?... Como, ¿qué soy, hacia dónde me dirijo?... Ser una niña a la que le gusta vivir cada ruptura en cada titular, como ser criticado por todo lo que dice y usa".
Así mismo, Paltrow también habló sobre los problemas que le trajo trabajar para Harvey Weinstein, quién fue su jefe en como presidente de Miramax durante varios años y que recientemente fue encarcelado tras haber sido arrestado y acusado de violación, además fue declarado culpable de dos de cinco delitos graves.
Si combinas esas cosas con el hecho de que, ya sabes, para ser totalmente sincero, tuve un jefe muy rudo durante la mayor parte de mi carrera cinematográfica en Miramax... Como, entonces tomas todas esas cosas y dices, No sé si esta es realmente mi vocación".
Previamente la actriz fue abierta con respecto a su interés por abandonar la actuación a inicios de año, pues comentó para Harper's Bazaar que algunas veces se sentía incomoda actuando, pues incluso hasta lo más pequeños detalles no podía soportarlo del todo y se sentía enfadada sobre eso.
Cuando estaba actuando, realmente me quemaba... Cuando el volante se puso en marcha, estaba haciendo de tres a cinco películas al año. Realmente llegué al punto en el que incluso las pequeñas cosas, como sentarse en la camioneta para ir al set, hacerse los retoques de maquillaje y todo, realmente no sé si puedo soportarlo", contó