Ciudad de México.- El cantante y compositor Felipe Gil, quien empezó como Fabricio, tuvo un fuerte despertar a sus 74 años de edad que lo impulsó a contar una verdad que estuvo reprimiendo durante muchos años: que en realidad era una mujer transgénero.
Felipe descubrió en el 2014, tras estar al borde de la muerte, que tenía que cambiar de género y adoptar la identidad de Felicia Garza.
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Tuve tres operaciones en una semana, estuve a punto de morirme y fue cuando decidí y dije: 'yo tengo que cambiar'. No puedo seguir viviendo bajo esta misma tónica de mi vida, tengo que hacer algo. No puedo, toda esta angustia interna, explosión por estar escondido me está matando", expresó.
Según cuenta el cantante, quien ahora tiene 79 años, lo más difícil fue contárselo a la mujer con la que compartió 23 años de su vida y a sus hijas, quienes le dejaron de hablar luego de saber de su transición.
Le dije: 'Soy yo, no eres tú. Soy transexual'. Y me aceptó y me acompañó a muchos lugares a conocer el mundo transgénero", expresó de su expareja.
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Al tiempo, sus hijas Eva María, María Teresa y Dulce María, fruto de su primer matrimonio (mujer con quien estuvo casada 19 años), recuperaron su relación con ella, pese a que la noticia les fue muy difícil de procesar.
Me pidieron un periodo de silencio para asimilar mi decisión y las respeto porque para ellas fue un shock. Por años intenté hacerme entender y no lo conseguí, porque muchas veces las puertas estuvieron cerradas, era un tabú hablar del asunto".
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Actualmente, Felicia asegura que se considera asexual, pues "no tiene la necesidad", ni está "interesada en volver a enamorarse". Reveló que se siente plena, pues ya tuvo hijos, familia y tuvo las relaciones que quiso en el pasado.
Hay una edad para todo, yo ya tengo como 7 años que no tengo esa necesidad, todavía existe esa posibilidad pero ya no. Yo casi me castre prácticamente con las hormonas porque me quitaron ese tipo de sensaciones porque tomo antiandrógenos", finalizó.
Felicia es un gran ejemplo de orgullo LGBT, pues ha contado su verdad para quitar los estigmas sobre la identidad sexual, además de que ha dado visibilidad a quienes tienen una identidad de género diferente al cuerpo con el que nacieron.
Fuente: Sale el Sol y De Primera Mano