Ciudad de México.- El periodista Omar Bello, en un periodo menor a tres años pasó de tener una buena vida profesional y una familia en Guerrero a quedarse sin nada en la Ciudad de México, puesto que está en un campamento de protesta en las banquetas de la Secretaría de Gobernación.
Presidente Andrés Manuel López Obrador realizaré una protesta rociándome gasolina y prendiéndome fuego, sus funcionarios solo juegan con la confianza de nosotros las víctimas, veremos qué le responden a la comunidad internacional, los derechos humanos no les importan, manifestó en su cuenta de Twitter.
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Su descontento se debe a que desapareció la ayuda y la protección que el gobierno le daba por ser un periodista desplazado de dicho estado, en donde las organizaciones criminales se han extendido a tal punto que se han vuelto imparables, pues estas ejercen el poder político, económico y judicial.
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En 2020, ocho mil 864 personas fueron desalojadas de sus casas en ocho de los 32 estados de México, sin embargo, el mayor número se concentró en Guerrero, con cinco mil 128 víctimas desplazadas forzosamente, entre ellos varios periodistas, esto de acuerdo con un informe anual publicado ayer 20 de enero por la Comisión Independiente para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos.
Omar fue perseguido por el Cartel de Sinaloa, los Beltrán Leyva y los Caballeros Templarios, por lo que tuvo que huir, desde ese momento fue uno de los beneficiarios del mecanismo de Protección a Periodistas, pero el presidente Andrés Manuel López Obrador decidió darle marcha atrás.
Fuente: Twitter @OmarBelloZihua y La Opinión