Ciudad de México.- El anteproyecto de la Ley General de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, la cual se presentó por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) ha levantado mucha controversia. Por esta razón, diversos científicos y estudiantes de varias instituciones piden hablar sobre esta.
Si bien la administración actual sostiene que esta nueva Ley mejoraría la formulación de políticas para la ciencia y tecnología, así como para garantizar más apoyos a la investigación, la comunidad científica sostiene que no los beneficia.
Leer también: Debido a nueva Ley, Conacyt buscará la refundación al sistema nacional de investigadores
Y no solo esta parte de los investigadores; según la revista científica de la American Association for the Advancement of Science (AAAS), Science, en una consulta a varios científicos mexicanos, el Gobierno actual se niega a hablar con ellos:
Han cancelado todos los canales de comunicación con nosotros”, comentó María Brenda Valderrama Blanco, investigadora en biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Cuernavaca, y uno de los miembros fundadores de Pro-CienciaMX, una cadena de investigadores que buscan influir en la política científica.
Ella, al igual que otros científicos, esperan que este aún se pueda modificar, pues este, así como está, le quitaría voz a la comunidad científica en la política de la ciencia futura; de igual forma, limitaría la libertad académica.
También puedes leer: ¡Prepárate! Conoce cuáles son los requisitos para solicitar una beca del Conacyt 2021
Por el contrario, creen los científicos, que esta nueva Ley podría ser una gran oportunidad para darle claridad y fuerza a las investigaciones y a la ciencia, pero es necesario que se escuche a la comunidad, como en marzo de 2020: luego de que un proyecto de ley anterior desapareciera por protestas, el Conacyt envió una invitación a investigadores para participar en el proyecto.
Por esta razón, diversos científicos piden abrir una mesa de diálogo con expertos de todas las áreas para que sus ideas sean escuchadas.
Se requiere un espacio “genuino, abierto y de diálogo constructivo” entre las partes, señaló Pedro Salazar Ugarte, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Fuente: Horas, La Jornada