Toluca, Estado de México.- La labor médica que ayuda a elevar la calidad de vida de menores que han sufrido lesiones por quemaduras, es una de las acciones más nobles de esta profesión y su impacto positivo en el entorno familiar y comunitario de los pequeños es invaluable. En la ceremonia de clausura de la primera Jornada 2022 de Cirugías Extramuros y de Valoraciones a Niños con Secuelas de Quemaduras, el secretario de Salud del Estado de México, Francisco Fernández Clamont, reconoció al personal que cumple esta noble tarea en el Hospital General “Dr. Nicolás San Juan”.
El jefe de la Unidad de Quemados de este nosocomio del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), Pablo Rodríguez Ferreira, realiza un trabajo que lo ubican como un referente a nivel nacional, pues con el apoyo de la Fundación Michou y Mau, IAP, y el Hospital Shriners para Niños Quemados de Galveston, Texas, han incidido positivamente en la vida de cientos de pequeños que han sido intervenidos.
Por su parte, el Director del Hospital General “Dr. Nicolás San Juan”, Erick Cruz Martínez, detalló que esta tarea se resume en una historia de grandes retos, pero también de grandes éxitos y, desde la creación de la Unidad, se ha beneficiado a cientos de menores de 18 años que sufren secuelas estéticas o funcionales como resultado de quemaduras severas, lo que les genera problemas psicológicos o les impide la movilidad de una parte de su cuerpo.
Agregó que el beneficio de este programa no es sólo para pacientes del Estado de México, sino para menores más allá de las fronteras mexiquenses y, también agradeció el apoyo de la institución de asistencia privada y el Hospital Shriners, pues en los casos de mayor complejidad se traslada al paciente a Galveston, Texas, en una acción coordinada que permite elevar la calidad de vida de población vulnerable.
En tanto, la Directora Ejecutiva de la Fundación Michou Mau, Marcela Fernández Botello, y la Señora Catalina Román Herrera, mamá de un niño beneficiado, coincidieron en señalar que la conjunción de esfuerzos, el profesionalismo y calidad humana de todos quienes participan en esta noble labor, han permitido ayudar a cientos de niños.
Fuente: Tribuna