Ciudad de México.- El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) confirmó ayer que no asistirá a la Cumbre de las Américas, un evento clave para la geopolítica regional que se celebrará en Los Ángeles, California del 6 al 10 de julio, esto debido a que el anfitrión Estados Unidos negó la invitación a gobiernos afines y cercanos a la 4T: Venezuela, Nicaragua y Cuba.
Durante veinticinco minutos en su mañanera de ayer, el mandatario intentó justificar su decisión de no representar a México en el evento y de desairar al gobierno de su principal socio comercial y económico, algo que hizo con poco éxito al divagar sobre su decisión, terminando por caer en adjetivos y señalamientos duros.
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En un momento intenso de su interlocución, López Obrador criticó a Estados Unidos por el bloqueo económico al que somete a Cuba desde hace años, uno de sus puntos para no acudir a la convocatoria de la Casa Blanca.
¿Cómo es que se va a mantener un bloqueo que impide que lleguen los alimentos al pueblo cubano? ¿Qué impide que lleguen las medicinas? ¡eso es un tipo de genocidio, de tremenda violación a los derechos humanos!”, dijo.
De acuerdo al tabasqueño, asistir a la Cumbre en el contexto actual por la posición norteamericana sobre varios de los países de centro y Sudamérica, “sería el colmo (…) Eso es contrario a la política exterior de México, a lo que establece nuestra Constitución, a la no intervención, a la autodeterminación de los pueblos”, explicó poco antes de lamentar no poder encontrarse con el presidente Joe Biden a quien considera “un hombre bueno sometido a fuertes presiones”.
Es decir, consideró que el mandatario más poderoso del mundo está doblado por sus rivales políticos.
- ESPERAN A EBRARD
Casi de inmediato, la Casa Blanca reaccionó a la decisión de López Obrador con un “lo entendemos y trabajaremos con el canciller Marcelo Ebrard”, con lo que quiso ponerle paños fríos a un tema candente, que provocó también que otros gobiernos descartaran acudir a California (Bolivia, Guatemala y Honduras).
Por supuesto que México es un jugador importante en el hemisferio y estamos muy agradecidos de que el Secretario Ebrad asistirá”, argumentó Nerd Price, vocero del Departamento de Estado.
Cabe señalar que López Obrador y Biden se reunirán a finales del próximo mes a solas, algo que, de acuerdo a los medios norteamericanos, se negoció desde hace días a través del embajador Ken Salazar, quien visitó Palacio Nacional al menos media docena de veces en el último mes.
- DURAS CRÍTICAS
De hecho, la prensa norteamericana y los analistas políticos no tardaron en posicionarse sobre el tema, lanzando duras críticas a un López Obrador al que ven como un presidente que busca el protagonismo y el liderazgo en América Latina a través de posiciones erráticas e inflexibles.
López Obrador llevaba semanas amenazando con boicotear la cumbre a menos de que todos los países del continente fueran invitados, pero durante su conferencia de prensa matutina cumplió con su promesa” escribió el New York Times.
En dicho diario, el más influyente en el país vecino, Tony Payan, experto en México del Instituto Baker, explicó que la determinación de López Obrador “alinea a México, en contra de sus propios intereses, con básicamente tres naciones bastante pequeñas, empobrecidas y dictatoriales. Al final, México está renunciando a un valioso lugar en la mesa”.
Los Ángeles Times alertaba que la posición de México ante la Cumbe no hace más que “enrarecer el ambiente diplomático, ya de por sí complicado”, al considerar que esto sólo divide a los países en un momento donde debería “apelarse a la unión”.
- LAMENTOS
Del lado mexicano las críticas no se dejaron esperar; Martha Bárcena, quien fuera embajadora de México en Estados Unidos aseguró que todo el tema es “un error, para mí, porque reconociendo el principio del presidente de que todos deben participar, creo que al final es un error, pues lo mismo que está defendiendo ahorita, lo podría haber defendido sentado en la mesa”, argumentó.
Para Arturo Sarukhán, también exembajador de México en Estados Unidos, López Obrador “cruzó la línea roja en materia de política exterior”, lo que supone un riesgo innecesario, más en esta “coyuntura política y económica”.
- POSICIONES CLARAS
Mientras el presidente mexicano se mostró inflexible, otros argumentaron que acudirían a la Cumbre para hablar por sus naciones y buscar acuerdos con Estados Unidos:
El presidente chileno, Gabriel Boric mencionó que es indispensable que el país hegemónico escuche a sus vecinos abiertamente, con el fin de alcanzar acuerdos que permitan el desarrollo sostenido de América Latina.
Chile, Perú y Argentina, naciones con gobiernos de izquierda, sí serán representados por sus titulares del Ejecutivo.
Fuente: Tribuna