Ciudad de México.- El Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México (AICM), que recientemente fue transferido al control de la Secretaría de Marina (Semar), se prepara para subcontratar aproximadamente 5 mil elementos de seguridad privada a fin de garantizar la vigilancia y la seguridad en sus instalaciones.
Esta medida ha generado controversia, ya que va en contra de la directiva del presidente Andrés Manuel López Obrador de emplear a los elementos del Servicio de Protección Federal (SPF), una entidad descentralizada de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), en lugar de recurrir a empresas de seguridad privada.
Recientemente, se han revelado seis licitaciones emitidas por el AICM en la plataforma Compranet, que buscan subcontratar servicios de seguridad y vigilancia en diversas áreas del aeropuerto, incluyendo los accesos, los estacionamientos, las zonas de revisión de equipaje y las áreas perimetrales de las Terminales 1 y 2. Estos servicios subcontratados deberán entrar en vigor a partir del 1 de noviembre y tendrán una duración hasta el 31 de diciembre de 2024.
En las últimas semanas, la seguridad del AICM ha sido cuestionada debido a incidentes como una balacera protagonizada por policías de Nezahualcóyotl, Estado de México, en el estacionamiento de la Terminal 2, en la cual una mujer perdió la vida. Además, el 3 de septiembre, un individuo logró saltar la barda perimetral del aeropuerto e ingresar al tren de aterrizaje de un avión de Volaris, lo que subraya la importancia de reforzar la seguridad en estas instalaciones.
El AICM planea subcontratar servicios de seguridad y vigilancia en varias áreas clave, entre ellas, la revisión de equipaje documentado y la segunda revisión de rayos X en los puntos de inspección de pasajeros de ambas terminales. Esto implica la contratación de 528 elementos de seguridad distribuidos en tres turnos de 176 elementos cada uno. El objetivo principal es garantizar la seguridad de los pasajeros, empleados y usuarios del AICM, previniendo actos de interferencia ilícita o intentos de comprometer la seguridad de la aviación civil.
Además de estos servicios específicos, se prevé la contratación de 685 elementos de seguridad para la supervisión operativa y administrativa de los servicios de seguridad subcontratados por el AICM en áreas públicas y restringidas, incluyendo el Centro de Gestión Aeroportuaria y las áreas bajo la responsabilidad de la Subdirección de Seguridad.
Otro aspecto importante es la seguridad en los Puertos de Inspección de Personas (PIP) y Salas de Última Espera (SUE) de la Terminal 1, donde se planea contratar a un total de 990 elementos de seguridad distribuidos en tres turnos de 330 elementos cada uno. Estos elementos serán responsables de llevar a cabo la revisión de pasajeros y su equipaje de mano antes de abordar las aeronaves, con el objetivo de prevenir la introducción de armas y explosivos, así como de impedir el acceso a áreas restringidas a personas que no cuenten con la Tarjeta de Identificación Aeroportuaria (TIA).
La licitación para el servicio de seguridad en el área de plataforma, zona perimetral y control de acceso de las Terminales 1 y 2 busca la contratación de 900 elementos de seguridad que desempeñarán diversas funciones, entre ellas, la prevención de interferencia ilícita o la detección de faltas administrativas.
En cuanto a la licitación que se enfoca en los Puertos de Inspección de Personas (PIP) y Salas de Última Espera (SUE) de la Terminal 2, se prevé la contratación de un total de mil 83 elementos de seguridad. Estos elementos participarán en acciones de emergencia ante situaciones que representen riesgos para la seguridad del aeropuerto.
Cabe mencionar que, según las especificaciones de las licitaciones, se espera que los elementos de seguridad traten con respeto al público en general, evitando confraternizar con cualquier persona y abstenerse de introducir dispositivos electrónicos en las áreas bajo su responsabilidad.
Fuente: Tribuna