Ciudad de México.- No cabe duda que los sonideros son parte de la cultura de los habitantes de la Ciudad de México, con música, reverberación en el sonido y grandes bailes, le dan vida a todas las reuniones y fiestas que tienen lugar, no solo en la capital, sino en toda la República Mexicana. Ahora, las autoridades reconocieron la importancia de esto y este día Martí Batres Guadarrama, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, entregó la declaratoria de patrimonio inmaterial a la cultura sonidera de la Ciudad de México.
De acuerdo con la titular de la Secretaría de Cultura, Claudia Curiel de Icaza, en la capital hay más de 10 mil sonideros activos. Asimismo, explicó que esta declaratoria surge para la protección a la cultura sonidera, a la tradición popular, que abarca este espectro de saberes y prácticas musicales, los cuales se componen del baile, la gráfica y la producción artística que eso significa.
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Por otro lado, señaló que en la próxima primavera se realizará el festival sonidero en el Zócalo de la Ciudad de México. Por su parte, el mandatario capitalino mencionó que en la cultura sonidera convergen diversos estilos musicales, los cuales se introducen en las fiestas y forman parte de ellas, las animan y las narran. Se trata de una característica única de la cultura sonidera y orgullosamente ahora es reconocida en la capital.
“Engloba distintos aspectos de la manifestaciones artísticas y culturales, es música, es baile, es iluminación, es fiesta en las calles y hay una interacción entre los sonideros y el público participante, no es una relación impersonal, no es que contactaste a alguien para llevar música, sino que el sonidero plática con los que están bailando”, explicó Martí Batres.
Por otro lado, el mandatario capitalino señaló que la cultura sonidera es organizada, ya que los sonideros también tienes sus identidades propias y no se tratan de empresas, sino que de amor por la identidad de cada uno de ellos, con su propio nombre, con su marca, lo cual hace que le den actividades únicas en las fiestas. Asimismo, aseguró que él escucha sonideros después de los temblores de 1985 y contó un poco de su niñez.
Explicó que en la colonia Doctores se organizaban fiestas del barrio, en las cuales él aprendió a bailar cumbia con sonideros, posteriormente el mandatario capitalino aprovechó para sacar sus mejores pases de baile en las inmediaciones del Museo de la Ciudad de México, con lo que inició la fiesta sonidera en la capital, ya que ahora se trata de patrimonio y material que se traspasa en la cultura capitalina.
Fuente: Tribuna