Ciudad de México.- El pasado martes 14 de febrero, los integrantes del Congreso de la CDMX aprobaron, con 45 votos a favor, contar con una reforma en la Ley Federal del Trabajo que beneficiaría a las mujeres y personas menstruantes para poder ausentarse por dos días de sus actividades laborales, permiso que además incluye que sea con goce de sueldo para que así no se vea afectado el salario que las empresas o empleadores otorgan de manera semana, quincenal o mensual.
De acuerdo con esta propuesta impulsada por la diputada Verónica Delgadillo, quien forma parte de la bancada de Movimiento Ciudadano (MC), este permiso no es solo para las mujeres, sino que también se ha tomado en cuneta a mujeres cisgénero, hombres trans, así como personas de género no binario e intersexuales. Del mismo modo, se propone que las mujeres gocen de un día de asueto también con goce de sueldo, para poder llevar a cabo estudios de mastografía y papanicolau, al tiempo que los hombre contarán con medio día libre para realizarse un examen de próstata.
"En México para la inmensa mayoría de las mujeres es incómodo hablar sobre menstruación con un familiar o un hombre, esto en gran parte porque la palabra menstruación carga con una profunda contradicción: es sinónimo de fertilidad pero también de vergüenza. Esa vergüenza corresponde a un tabú social y a la desinformación que sigue estando presente en nuestra sociedad".
¿Para quiénes aplica el permiso menstrual?
A pesar de que en esta iniciativa se toman en cuenta a las mujeres, mujeres cisgénero, hombres trans, personas de género no binario e intersexuales, se hizo hincapié en que el permiso será para aquellas personas que fueron previamente diagnosticadas con dismenorrea primaria o secundaria incapacitante, afección médica que se caracteriza por la presencia de dolores menstruales severos y frecuentes que impiden que se realicen las actividades de manera cotidiana.
Alicia Medina Hernández, diputada d ella bancada de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), apuntó que para que las mujeres puedan contar con dicha autorización, deberá haber de por medio una justificación mediante certificado médico emitido por un especialista, en este caso, alguien enfocado en la ginecología. Del mismo modo, los patrones no podrán despedir a una mujer o bien, obligarla a presentar su renuncia por el hecho e haber sido diagnosticada con esta afección en cualquiera de sus categorías, es decir, primaria o secundaria.
Tras avalar esta reforma, se pidió al Congreso de la Unión impulsar políticas que permitan avanzar en cuanto a los derechos de las mujeres se refiere y con ello, erradicar los temas de desigualdad, discriminación o violencia en cualquiera de sus formas. "Es urgente dejar de normalizar el dolor de las personas que menstrúan, quienes se ven obligadas a realizar sus actividades cotidianas aún con una condición física que en ocasiones las incapacita física e intelectualmente".
Fuente: Tribuna